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Meliá completa su sucesión: su fundador Gabriel Escarrer se convierte en Presidente de Honor y deja paso a su hijo

El nuevo presidente será el hijo del fundador, que ya ocupada el cargo de consejero delegado desde 1999 | Asume también la presidencia del Consejo de Administración

Gabriel Escarrer, nuevo presidente  de Meliá Hotels International.

Gabriel Escarrer, nuevo presidente de Meliá Hotels International. / EP

Gabriel Santamarina | David Page

Meliá completa la sucesión de Gabriel Escarrer Juliá, hasta ahora presidente de la compañía hotelera. El fundador de Meliá se convierte en Presidente de Honor, aunque conservará su puesto como consejero externo dominical y vocal del Consejo de Administración. Mantendrá "funciones de representación y de asesoramiento al Consejo y al nuevo presidente", ha informado la empresa en un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

"El Consejo de Administración ha agradecido a Escarrer Juliá su gran dedicación, su inestimable aportación y apoyo, y destaca que estos acuerdos vienen a dar virtualidad al Plan de Sucesión elaborado y aprobado por unanimidad el 13 de diciembre del año 2016, dando continuidad a la voluntad del fundador de dejar la transición ordenada y preparada para la gestión del negocio y transmitiendo la necesaria seguridad y confianza a todos los grupos de interés”, ha añadido Meliá en un comunicado.

Gabriel Escarrer Jaume, nuevo presidente

El nuevo presidente será el hijo del fundador, Gabriel Escarrer Jaume, que ya ocupada el cargo de consejero delegado desde 1999. Escarrer Jaume ha estado vinculado desde el principio de su carrera laboral a Meliá: tras finalizar sus estudios, comenzó a trabajar en el banco de inversión Salomon Smith Barney, en Nueva York, donde participó en la salida a bolsa de la hotelera. Más tarde lideró la expansión y transformación de Meliá y ejecutó el plan de remodelación de todos los activos de la compañía.

Últimos resultados Meliá

Durante el primer trimestre de 2023, Meliá mejoró sus ingresos un 45,9%, hasta los 396,1 millones de euros, y logró un ebitda de 77,9 millones. La hotelera logró cerrar los tres primeros meses del año prácticamente en 'break even', con unas pérdidas 500.000 euros. Esto supuso mejorar sustancialmente los resultados del mismo periodo del año anterior, cuando perdió 59,3 millones. Meliá tiene una deuda neta de 2.736,5 millones de euros, aunque su foco está puesto en reducirlo. Mantiene una posición de liquidez de 360,5 millones