Premios Cine Europeo

La cinta de animación 'Robot Dreams' triunfa en Berlín en el día del gran homenaje a Isabel Coixet

'Robot Dreams, de Pablo Berger, vence en la categoría de mejor película de animación y pone la directa en su carrera hacia los Oscar

36º Premios del Cine Europeo en Berlín.

36º Premios del Cine Europeo en Berlín. / EFE

Redacción

El filme español 'Robot Dreams', de Pablo Berger, coproducido con Francia, fue distinguido este sábado en Berlín con el premio a la mejor película de animación de la Academia del Cine Europeo (EFA).

La cinta premiada cuenta la historia de Dog, un perro solitario que vive en Manhattan en los años 80 y que un día decide construirse un robot, un amigo. Se vuelven inseparables hasta que un accidente obliga a Dog a abandonar a Robot en una playa.

En un discurso tan corto como reivindicativo, Berger trató de hacer calar entre el público presente el mensaje de que "La animación no es un género", tal y como proclamó Guillermo del Toro en la pasada gala de los Oscar.

"No voy a parar hasta que la industria nos trate como iguales", dijo, y dedicó el galardón a "la creativa y vibrante industria del cine de animación española". Recordó que esta es su cuarta película, pero la primera de animación, y aseguró que no será la última, al tiempo que animó a todos los creadores a explorar las "interminables" oportunidades de este cine.

Con este premio. 'Robot Dreams' se sitúa en una posición inmejorable de cara a la carrera para estar en la terna de candidatos a los Oscar.

Coixet, homenajeada

La del sábado fue una gala con mucha presencia española y catalana, tanto en los premiados como entre los homenajeados y presentadores.

Una embarazadísima Laia Costa hizo de maestra de ceremonias en el homenaje a una excitada Isabel Coixet que venía a recoger el Premio Logro Europeo en el Cine Mundial, "por su impresionante contribución al mundo del cine", distinción que aprovechó para animar a los cineastas a los que se les diga que no son lo suficiente buenos a creer en sus proyectos.

La directora catalana, explicó que muy pronto en su carrera se dio cuenta que "detrás de la cámara no hay fronteras, pasaportes, banderas o límites". "Me gustaría que el mundo fuera así", enfatizó.

Coixet dedicó el premio a todos los cineastas en Europa a los que se les ha dicho que no son lo suficientemente buenos, interesantes, controvertido o comerciales, entre muchos otros requisitos que supuestamente deben cumplir para triunfar en el mundo del cine.

"Cuando algo proviene de un lugar muy fuerte en tu corazón hay alguien a quien le gustará y conectará con lo que haces", les dijo Coixet.

La Academia destacó al anunciar el premio que Coixet, "a lo largo de su carrera, en sus películas, en sus escritos y en su compromiso político, siempre ha defendido sus creencias y valores, y ha dado voz a sus protagonistas".