El servicio de Cirugía del Hospital Can Misses ha realizado ya biopsia de ganglio centinela a dos enfermas de cáncer, según explicaron ayer fuentes del Área de Salud de Ibiza y Formentera. Hasta ahora, para este proceso las pacientes debían desplazarse hasta Mallorca, ya que, al utilizar una sustancia radiactiva , tenían que hacerlo profesionales de Medicina Nuclear, servicio del que carece el hospital ibicenco. La nueva técnica, sin embargo, utiliza hierro paramagnético, sustancia sin radiación, y, desde hace unos días, se realiza en Ibiza.

«Es muy importante», afirmó la consellera balear de Salud, Patricia Gómez, tras visitar el laboratorio de Anatomía Patológica de Can Misses, donde se encuentra parte de la maquinaria para esta prueba. Gómez, a la que acompañaron la dirección del hospital, el director del Ib-Salut, Juli Fuster, y la jefa de Cirugía, Lupe Moreno, detalló que la puesta en marcha de esta técnica evitará, cada año, el desplazamiento de alrededor de treinta mujeres (el comité de tumores, sin embargo, calcula que serán algunas más, alrededor de 45) a los hospitales mallorquines de Son Espases o Son Llàtzer, «con el coste personal y social que ello conllevaba».

La consellera recalcó también que la biopsia de ganglio centinela, además de reducir los desplazamientos evitará también segundas intervenciones a enfermas de cáncer de mama. Esto se debe a que, según explicó, si este ganglio (el primero de la cadena linfática y al que primero llegan las células cancerosas) se analiza y está afectado, se pueden extirpar el resto de ganglios, o parte, en la misma intervención. De la misma manera, evitará que aumente la lista de espera para esta prueba en el Mallorca, con la «ansiedad y el sufrimiento» que esto supone para las pacientes.

Es el cirujano quien inyecta una partícula de hierro paramagnético cerca del tumor para localizar el ganglio centinela y, cuando lo detecta, lo extirpa con una pequeña incisión. Ésta se lleva al laboratorio de Anatomía Patológica, donde analizan si contiene células cancerosas. En el caso de que las encuentren, el cirujano puede extirpar en ese mismo momento los ganglios cercanos. En general, se trata de una intervención que no requiere la hospitalización de las pacientes.

Una de las principales ventajas de la biopsia de este primer ganglio de la cadena linfática es que evita la extirpación de ganglios a algunas pacientes cuando el resultado de los análisis es negativo.

El gerente del Área de Salud de Ibiza y Formentera, Josep Balanzat, adelantó el pasado mes de marzo su intención de poner en marcha esta técnica, que hace meses ya que se realiza en el hospital Mateu Orfila de Menorca, en Ibiza. El gerente hizo este anuncio después de que el comité de tumores del Hospital Can Misses lo reclamara por escrito defendiendo los beneficios para los pacientes y su reducido coste. Balanzat explicó que la puesta en marcha de esta técnica, patente de una empresa, Sysmex, que se ofreció a proporcionar de forma gratuita el material necesario para unas sesiones de prueba e incluso hizo una presentación en una sesión clínica el 4 de marzo, dependía de que el Servei Balear de Salut la aprobara. El visto bueno del Comité de Incorporación de Tecnología llegó el pasado 8 de noviembre.