­Los ruidos que se producen en Sant Antoni centraron buena parte de las protestas que expresaron ayer en el pleno los dos grupos de la oposición. Ambos habían presentado propuestas a tratar en esta sesión con las que reclamaban alguna actuación concreta al equipo de gobierno para afrontar el problema, pero las mociones de Nova Alternativa no entraron en el orden del día porque, según la alcaldesa, Pepita Gutiérrez, no se presentaron con la debida antelación.

A pesar de que no se pudo debatir ninguna propuesta de Nov-A, los dos concejales del grupo manifestaron su particular protesta luciendo las camisetas imprimidas por la Asociación de Vecinos de Sant Antoni para denunciar el exceso de ruidos que sufre la población. En su diseño se reclama expresamente no sobrepasar el límite máximo de 65 decibelios fijados en la normativa municipal.

Sí que se debatió la iniciativa de PSOE-Pacte sobre convivencia en Sant Antoni, en la que este grupo reclamaba el cumplimiento de las ordenanzas para evitar los escándalos públicos y la delincuencia callejera que tantas veces han denunciado. En este punto el portavoz, Josep Marí, Marge, lamentó tener abordar de nuevo este aspecto, después de que el año pasado se acordó un «pacto de silencio» con el equipo de gobierno para evitar que los disturbios callejeros fuesen materia constante en los medios de comunicación. Pero «ustedes no han cumplido y Sant Antoni está peor que hace tres años», señaló.

La concejala del mismo grupo Silvia Limones, por su parte, acusó a los miembros del equipo de gobierno de carecer de interés en solucionar la situación: «Ustedes -afirmó- no viven en el interior del pueblo de Sant Antoni, están muy tranquilos en sus casitas en el campo, pero los vecinos no podemos vivir y tenemos derecho a hacerlo. Hagan algo, por favor».

El concejal de Gobernación, Xico Cardona, reconoció que con una plantilla policial limitada como la actual no se puede hacer más, aunque expresó su confianza en que las medidas tomadas por el equipo de gobierno resultarán eficaces antes de final del verano.

Unanimidad: Todos los grupos piden al Consell que mantenga el PIOS

Los progresistas presentaron en Sant Antoni la misma propuesta que en otros municipios para que el Ayuntamiento inste al Consell y al Gobierno central a mantener el Plan Insular de Obras y Servicios (PIOS). A propuesta de Nova Alternativa se adoptó una fórmula de la que resultó un acuerdo unánime asimilar al que había adoptado el día anterior el pleno de Sant Josep. Mientras que Nov-A apoyó a los progresistas en la propuesta de dirigirse al Gobierno central y la mayoría del PP la rechazó, no obstante hubo unanimidad para dirigirse al Consell y reclamar que se mantenga el PIOS, con sus inversiones previstas para este año. La alcaldesa, Pepita Gutiérrez, observó en este punto que su grupo está «tan interesado como nadie» en el mantenimiento de este plan.

Ropa reivindicativa: Camisetas contra el ruido y a favor de la educación pública

La vestimenta reivindicativa por parte de la oposición marcó de una forma especial el pleno ayer en Sant Antoni. Mientras los dos concejales de Nov-A reclamaban un tope de ruido de 65 decibelios, los miembros del grupo PSOE-Pacte se sumaron al movimiento emprendido por los docentes contra los recortes en la educación pública y que se conoce con el nombre de ‘marea verde’, en alusión al color de las camisetas que se usan en esta reivindicación. La concejala de este grupo Maria Torres, enseñante y promotora de la idea de que todos sus compañeros acudiesen al pleno con este atuendo, señaló que esta había sido la primera vez, pero no será la única que se tome una medida similar. «En el próximo pleno nos pronunciaremos a favor de la sanidad pública», anunció.