Detienen al conductor de la furgoneta que mató a dos ciclistas en Montserrat (Valencia)

Era cuestión de tiempo que fuera detenido por cualquier patrulla, al estar plenamente identificado, o acabara entregándose él mismo. Finalmente el presunto autor de las muertes de los dos ciclistas arrollados el pasado martes en la CV-405 ha optado por la segunda opción, y se entregó voluntariamente ayer en Madrid. Eso sí, más de 24 horas después de atropellar con la furgoneta del trabajo a ambos ciclistas y darse a la fuga y después de que los investigadores de la Guardia Civil lo tuvieran pelenamente identificado. La Guardia Civil lo tenía identificado desde el mismo día del siniestro, gracias a la descripción del vehículo dada por el tercer ciclista y único superviviente, tal como adelantó Levante-EMV, del grupo Prensa Ibérica. Y ayer procedieron formalmente a su detención por dos delitos de homicidio imprudente y un delito de abandono del lugar del accidente después de entregarse con su abogado.

El Grupo de Investigación y Análisis del Grupo de Tráfico (GIAT) de la Guardia Civil tenía identificado al conductor de la furgoneta que arrolló y mató a los dos ciclistas desde el mismo día de atropello mortal, al confirmar que se trataba de un trabajador de una empresa de paquetería que hacía dicha ruta esa mañana. No obstante, el sospechoso no regresó a su puesto de trabajo y huyó para tratar de evitar la acción de la Justicia o al menos retrasar su detención.

El detenido, asistido por su abogado, se negó a prestar declaración en sede policial, por lo que, tras pasar la noche en los calabozos de la Guardia Civil de Madrid, será puesto a disposición judicial del Juzgado de Instrucción nº 6 de Madrid, en funciones de guardia, en la mañana de hoy.

En cuanto al siniestro mortal, las diligencias policiales serán entregadas al Juzgado de Instrucción nº 3 de Torrent.

"Le gustaría que su muerte sirviera para concienciar a la sociedad"

La comunidad de cicloturistas valencianos está de luto tras las muertes de Perico Garfella y Federico Muñoz, de 74 y 73 años, quienes fueron arrollados el pasado martes en Montserrat por una furgoneta de paquetería cuyo conductor se dio a la fuga tras el atropello. Especialmente dolorosa ha sido su pérdida para la Peña Ciclista Vara de Quart, de la que formaban parte, quienes han transmitido todo su ánimo a sus familias, rotas por este duro golpe que pone de nuevo de relieve la vulnerabilidad de los ciclistas en la carretera.

«Salir con la bici ha sido la pasión de mi padre, y se ha ido haciendo lo que más le gustaba. Estoy convencido de que le gustaría que su muerte sirviera al menos para concienciar a la sociedad sobre la importancia de evitar que se repitieran más muertes ciclistas en la carretera», ha indicado el hijo de Federico en un breve escrito a este periódico.

Su familia no quiere hacer sangre con la persona que atropelló y mató a dos ciclistas en la carretera CV-405 en la mañana del martes y aseguran que prefieren no guardarle rencor. «Entendemos que los accidentes ocurren y ya es suficiente carga haber truncado la vida de tres familias: la de los fallecidos, y la del propio conductor involucrado». Tan sólo nos gustaría aprovechar para hacer una petición a todos los conductores, y es que por favor respeten a los ciclistas. 

Identificado apenas unas horas después

Un nuevo homicidio al volante que se cobra la vida de ciclistas, ocurrido en la mañana del martes en el punto kilométrico 7,700 de la carretera que une Torrent y Montserrat, justo en el punto en el que limitan ambos términos municipales. El presunto autor del doble atropello mortal fue identificado apenas unas horas después y ya está detenido. Se trata de un trabajador de una empresa de paquetería de Quart de Poblet que estaba en ruta de reparto hacia Turís y Dos Aguas.

Su identificación fue posible gracias a la descripción de la furgoneta, de color blanco, que dio el superviviente, quien pese a no poder memorizar la matrícula ni ver el nombre de la empresa de reparto, sí aportó datos relevantes a la Guardia Civil sobre los elementos cromáticos del vehículo que ayudaron a concretar la empresa a la que pertenecía.

De hecho, con esos datos, agentes de la Policía Local de Torrent, que también se habían desplazado hasta el lugar del siniestro, al igual que la Policía Local de Montserrat, al estar justo en el límite entre ambas poblaciones, pudieron localizar estacionada en Torrent una furgoneta que respondía a dichas características. Aunque no se trataba del vehículo implicado en el siniestro, sí se pudo confirmar que era de la misma empresa de paquetería, con sede en Quart de Poblet.

Hasta allí se desplazaron agentes del Grupo de Investigación y Análisis de la Agrupación de Tráfico (GIAT) de la Guardia Civil, para confirmar el vehículo que hacía el citado trayecto esa mañana y el conductor del mismo, quien está plenamente identificado y es cuestión de horas que acabe siendo localizado o se entregue voluntariamente.

Uno de los motivos más habituales por los que un conductor homicida suele abandonar el lugar del accidente es precisamente para evitar ser sometido a una prueba de alcoholemia, lo cual en caso de resultar positiva agravaría su condena.

A toda velocidad

El atropello mortal se produjo a las 8.45 horas del martes en el punto kilométrico 7,700 de la CV-405. Una sanitaria del CICU, que se encontraba fuera de servicio, alertó del siniestro. Según el relato del superviviente, de 78 años, el conductor de la furgoneta llegó a parar unos metros delante del lugar de la colisión tras arrollar a sus dos compañeros. No obstante, acto seguido reanudó la marcha a toda velocidad dejando malheridos a los dos ciclistas y sin detenerse a socorrerlos.

Hasta el lugar del siniestro se desplazó una ambulancia del SAMU y un Soporte Vital Básico. Los medios sanitarios lograron estabilizar en un primer momento a uno de los heridos, de 73 años, que fue evacuado al Hospital La Fe de València, donde finalmente falleció. El otro, de 74 años, murió en el mismo lugar del accidente y su cuerpo fue hallado en la cuneta. En su caso los medios sanitarios solo pudieron certificar su fallecimiento.

El conductor podría enfrentarse a dos delitos de homicidio imprudente y abandono del lugar del accidente.