Encuentran un iPhone que cayó desde 5.000 metros de altura del Boeing que perdió la puerta... y sigue funcionando

El viernes un avión de Alaska Airlines aterrorizó a los pasajeros al perder parte del fuselaje en pleno vuelo

Un iPhone irrompible

Un iPhone irrompible / X

El pasado viernes, un avión de Alsaka Airlines despegaba de Oregón (EEUU) y a los siete minutos estalló parte de su fuselaje, desprendiéndose una puerta de la aeronave, lo que provocó una descompresión que aterrorizó a los 171 pasajeros y cuya pérdida de presión le arrancó de cuajo la ropa a un niño y se tragó varios móviles que algunos pasajeros llevaban en la mano.

El domingo, los investigadores dijeron que habían encontrado el trozo de fuselaje que se desprendió del avión Boeing y esperaban que proporcionara pruebas de lo que había fallado.

El enorme agujero en el lateral del avión de Alaska Airlines se abrió donde Boeing, el fabricante de aviones, coloca un "tapón" para cubrir una salida de emergencia que la aerolínea no utiliza. Los tapones se encuentran en la mayoría de los Boeing 737 Max 9.

El iPhone indestructible

Ayer mismo, un ciudadano norteamericano publicaba en X que había encontrado un iPhone al lado de una carretera. El smartphone funcionaba correctamente, se encontraba en modo avión y tenía bastante batería.

La sorpresa llegó cuando activó la pantalla del móvil y se encontró con una notificación del vuelo ASA1282, el mismo que sufrió la pérdida del fuselaje. El joven se puso en contacto con la NTSB (la agencia norteamericana que investiga accidentes de transportes) y cuál fue su sorpresa cuando le informaron de que ese teléfono pertenecía a uno de los pasajeros del vuelo de Alaska Airlines y que era el segundo que se localizaba.

El iPhone cayó desde 5.000 metros y no se le había roto ni la pantalla.