¡Un paraíso, esta Ibiza!
Marzo ya está aquí y con él muchos comercios y bares que cerraron tras el verano comienzan sus preparativos para abrir de nuevo. La temporada está a punto de empezar y hay que tenerlo todo listo para recibir, como merecen, a nuestros queridos turistas. También empiezan a salir a la luz anuncios de viviendas y habitaciones dispuestas a alojar a quienes tienen pensado venir a trabajar a la isla. ¿Lo conseguirán este año? Los precios superan con creces el salario mínimo. Entre la oferta, habitaciones compartidas por más de 2.400 euros. ¡Un paraíso, esta Ibiza! Pero, oigan, esto es la ley de la oferta y la demanda. Cada uno pone a lo suyo el precio que quiere, ¿no? Quizás llegue verano y encontremos (y también los turistas) que en un restaurante tardan una hora en atendernos porque no hay camareros, hoteles que a pesar de tener todas las estrellas no puede ofrecer el nivel porque no hay quien trabaje en ellos y tiendas cerradas por falta de empleados. Está bien perseguir a quienes usan sus pisos para hacer negocio turístico. También lo de contratar inspectores para que detecten estos alquileres. La cuestión es, ¿realmente estas medidas bajarán los precios hasta un nivel razonable? ¿Cuánto tardará en pasar? ¿Cuántos guardias civiles, médicos, profesores… tendrán que irse para que los políticos tomen decisiones valientes que permitan a la gente vivir con dignidad en esta isla?
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