Cuando las cosas se hacen bien es justo decirlo. Por eso, el pasado miércoles cuando fui a la ITV me vino a la cabeza todas las veces que había hablado pestes de este servicio gestionado por el Consell de Eivissa. Antes, ir a las instalaciones de la Inspección Técnica de Vehículos en Santa Gertrudis era como entrar en un agujero negro. Sabías cuando entrabas pero no cuando podrías salir. Primero hacías la cola en la oficina y luego esperabas tu turno dentro del coche. Cuando ibas sin cita previa debías hacer además otra cola más a primera hora de la mañana en la puerta del recinto. Tres colas y más de una hora segura de espera. La cita previa, además, había que solicitarla por internet al menos con cuatro meses de antelación. Ahora todo eso es historia. El miércoles fui a pasar la ITV por undécima vez en Eivissa. Pedí la cita online hace un mes e hice el pago también online. Llegué a la estación móvil del Recinto Ferial directa y sin bajarme del coche ya estaba esperando mi turno para la inspección. Media hora después ya estaba fuera. Un servicio impecable pero mejorable para los trabajadores y usuarios que se merecen unas instalaciones fijas decentes.
