Ibiza recicla ya casi el 40% de los residuos que produce, pero incumple todavía la ley

La ley de residuos de Balears de 2019 establecía que, dos años después, en 2021, se tenía que alcanzar el reciclaje del 50% en peso de cada fracción. El mismo objetivo, incumplido, marca el plan director sectorial de residuos de Ibiza. Según los datos de la generación y recuperación de residuos en origen (lo que se lanza a los contenedores), el año pasado en Ibiza se recicló el 39,7% del total de desechos producidos.

El conseller insular de Gestión Ambiental, Vicent Roig, sostiene que, aunque «no se cumple el objetivo, cada vez está más cerca». De momento, no hay penalizaciones, aunque augura que las habrá, salvo que ahora la tasa de residuos es más elevada cuantos menos residuos se recuperan.

Roig hace «una lectura positiva» si se tiene en cuenta que en 2019, el último año antes de la pandemia, el porcentaje de residuos recuperados se situaba en el 17% y ahora, según los datos de 2022, en el 31,5%. «Casi se ha duplicado. No llegamos a lo que marca la ley, pero estamos ya lejos del dato de 2019», recalcó. Hay que tener en cuenta que el dato real del total reciclado en 2022 es el 39,7% (al sumar también lo recogido en las deixalleries, donde el año pasado se recuperaron 15.909 toneladas).

El año pasado se produjeron en la isla un total de 133.106 toneladas de residuos, de los cuales se recuperaron 52.860 toneladas (también restos de obras y poda). Así, en 2022, Ibiza generó 621,8 kilos por residente (según el Índice de Población Humana, que asciende a 214.073 personas) y 863 kilos si se considera sólo la población censada. Según datos de 2019, en Balears la producción por residente (en función del IPH) era de 520 kilos por habitante, y en España, de 483,7 kilos (según los datos del Instituto Nacional de Estadística, también de 2019).

Aumento de residuos en masa

Por otra parte, el año pasado se produjeron un total de 80.245 toneladas de residuos en masa (los que se lanzan al contenedor de color gris), lo que supone un 7,8% más que en 2021. Sin embargo, baja un 32% en comparación con los datos de 2019, el año previo a la pandemia de covid (118.303 toneladas). Curiosamente, en 2020, cuando la población estuvo confinada en casa durante unos meses, y la activad económica fue «casi nula» se generaron más residuos en masa que en 2021 y 2022. Roig lo atribuyó a la subida de las compras on line.

El incremento del porcentaje de lo que se recicla se explica por la puesta en marcha de la recogida de los residuos orgánicos (el contenedor marrón) a partir del primer semestre de 2021. Ese año, los residuos recuperados se situaban en el 27,5% del total producido en la isla. Además, a finales de 2020 se puso en marcha la planta de triaje, en la que se seleccionan los residuos que entran en el vertedero para enterrar sólo lo que no sea recuperable. Los datos apuntados no contemplan este trabajo de triaje en Ca na Putxa, sólo el que se produce en los hogares y empresas.

El aumento de las cifras de recogida selectiva afecta a todas las fracciones: papel (18,5%), envases (17%), vidrio (29,3%). Sin embargo, la subida más significativa se da en la recuperación de residuos orgánicos (67,2%), al pasar de 5.599 a 9.348 toneladas. Además, en Santa Eulària sólo se recoge la fracción orgánica a los productores singulares (establecimientos y negocios), pero no a la población en general. En Sant Joan tampoco se ha puesto en marcha este servicio, por lo que el margen de mejora de esta fracción es amplio. De hecho, el conseller Roig destacó que, de cara a 2030, sólo se tiene que enterrar en el vertedero el 10% de la basura tras el cribado en la planta de triaje de Ca na Putxa.

El conseller de Gestión Ambiental también incidió en que en la última década se ha producido «una subida exponencial» en la recogida selectiva al pasar de 12.797 toneladas en 2012 a casi 37.000 toneladas el año pasado. También dijo que los ciudadanos están «más concienciados» en la recuperación de papel y vidrio y no tanto de envases (el contenedor amarillo).

El vertedero aún puede durar entre siete y ocho años más

El conseller insular de Gestión Ambiental, Vicent Roig, afirma que, con la mejora de la recogida selectiva, se está ampliando la vida útil del vertedero de Ca na Putxa, que ahora sitúa entre siete y ocho años más. En todo caso, Roig apunta que en el nuevo plan director de residuos, que debe sustituir al actual que caduca en tres años, ha de prever ya la opción alternativa a Ca na Putxa: su ampliación, la construcción de un vertedero en otra zona de la isla, una incineradora o bien el traslado de los residuos a Mallorca.

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