La Policía Nacional sigue investigando el incendio de una infravivienda el pasado sábado en la zona de sa Joveria, en el extrarradio de Ibiza, en el que falleció una persona sin techo. Si en un principio se explicó que era un conocido indigente nacido en Barcelona, ahora ha trascendido que el muerto es un rumano de 49 años de edad, Cristinel I., que residía en la chabola destrozada por las llamas.
Los dos agentes de la Policía que llegaron al lugar se encontraron con un hombre envuelto en llamas fuera de la vivienda incendiada. Como ya publicó Diario de Ibiza, la víctima estaba todavía con vida y además de reclamar ayuda, les dijo a los agentes: «Han venido a por mí, han venido a matarme».
Esta declaración y el hecho de que un testigo afirmara que vio cómo varias personas huían de la zona poco después de que se iniciaran las llamas, sustentan las sospechas de los investigadores de que fue un homicidio.
En cualquier caso, fuentes cercanas a la investigación tampoco descartan que las personas que este testigo vio salir corriendo huyeran también de las llamas.
«Es muy probable» que el incendio fuera provocado, insisten las mismas fuentes.
Los agentes de la Policía científica pudieron tomar muestras de las huellas dactilares de la víctima a pesar de que tenía quemaduras de tercer grado en el 90 por ciento de su cuerpo.
Gracias a estas pruebas, los forenses pudieron identificar al fallecido el pasado lunes, apenas un día y medio después de que se produjeran los hechos.
