El Ayuntamiento de Sant Josep ha hecho un balance positivo del primer año de funcionamiento de la oficina municipal de la vivienda, Habita Sant Josep, y su servicio de asesoramiento jurídico que se ofrece tanto a inquilinos como a propietarios. En este tiempo se han atendido 112 personas, que han formulado un total de 168 consultas.

La intención del Ayuntamiento, según informa en una nota de prensa, es continuar dando este servicio, que "permite calibrar las necesidades de los ciudadanos y planificar las posibles ayudas económicas y sociales".

"El servicio de asesoramiento ha vivido un incremento de las consultas raíz del confinamiento y la crisis económica derivada de la Covid-19", advierte el Consistorio. Desde su puesta en marcha en septiembre de 2019 y hasta febrero pasado registraron 61 en total, detalla. "Con la reanudación de la atención en Habita Sant Josep, en el mes de mayo, y hasta el 30 de septiembre ya se han atendido 107 consultas", se indica en la nota municipal.

Hasta el mes de enero, el 90% de las consultas fueron realizadas por "personas en régimen de alquiler, sobre todo mujeres. Más del 80% de estas atenciones estaban motivadas por dudas relacionadas con la finalización del contrato de arrendamiento y la preocupación para perder la vivienda y tener que buscar un de nuevo".

En cuanto al perfil familiar, informa la nota municipal, "un 32% de las consultas atendidas por Habita afectan a una familia convencional, en el 30% de ocasiones la consulta procede una familia monoparental, las parejas sin hijos representan el 28% de atenciones y el 10% de consultas restantes las formularon los propietarios" de los inmuebles.

En este primer periodo, antes de la pandemia, el abogado Juanjo Ferrer, responsable del servicio, ha resaltado la situación que se vivía en Cala de Bou, donde se ha atendido «un número relevante de casos de personas que ocupan una vivienda, con el contrato de alquiler vencido o sin contrato, en pisos que han formado parte de quiebras empresariales, adjudicados a entidades financieras o fondos de inversión. En todos los casos se trataba de familias que tenían que hacer frente a procedimientos judiciales de desahucio».

Después del confinamiento de marzo, el perfil económico de los usuarios se ha modificado. "A pesar de que la mayoría de consultas las han seguido haciendo mujeres -agregan desde el equipo de gobierno en el balance-, en la mayor parte de casos se trataba de trabajadoras en situación de ERTE o paradas sin ningún tipo de ayuda y que tampoco habían recurrido previamente a los servicios sociales del Ayuntamiento, hecho que genera situaciones de angustia a las usuarias. Esto ha hecho que parte del trabajo de asesoramiento haya derivado a orientar en la solicitud de peticiones a la administración".

Las demandas procedentes de familias monoparentales han pasado a representar la mitad de los casos (recientemente separadas, en su mayor parte), mientras que el 20% de consultas han procedido de familias convencionales. Las consultas formuladas por propietarios han bajado hasta el 4%.

En cuanto al motivo de la consulta, el 90% estaban relacionadas con la imposibilidad de hacer frente al alquiler por la crisis derivada de la pandemia. A pesar de que también se ha dado el caso de propietarios que han ayudado puntualmente a los inquilinos con rebajas e incluso la condonación de alguna mensualidad, "este no ha sido el comportamiento mayoritario detectado a Habita Sant Josep, que ha atendido situaciones en que se reclamaba los meses de retraso al usuario y se le requería abandonar la vivienda", advierten desde el Ayuntamiento.

Tanto antes de la pandemia como después, el abogado responsable del servicio explica que ha percibido «numerosos abusos a los que tienen que hacer frente las arrendatarias a causa del mercado residencial tan restringido que existe en la isla, y que con la Covid-19 se han acentuado sin observar ni bajas de precios ni más ofrecida de vivienda al mercado».Medidas de apoyo a las familias

Una de las primeras acciones en el marco de las medidas de apoyo a las familias del municipio del Ayuntamiento de Sant Josep fue la de destinar 200.000 euros a ayudas de alquiler para las personas afectadas por las consecuencias económicas de la Covid-19, que están en su última fase de tramitación después de publicarse la lista provisional de beneficiarios. Específicamente para los jóvenes y estudiantes, se han consignado otros 60.000 euros para ayudas.

Habita Sant Josep, informa la nota municipal, "sigue abierto a las consultas de la ciudadanía, tanto de manera telemática como presencial: los martes a las oficinas municipales de Cala de Bou y los jueves en las de Sant Jordi. Para ser atendido se tiene que pedir cita previa al correo electrónico habitasantjosep@gmail.com".