Un año espectacular, de récord, afirman empresarios, patronales, instituciones. Al albor de la llegada masiva de turistas que colapsan las infraestructuras y la paciencia de los pitiusos, crece la economía, que recupera algunos de los niveles previos al estallido de la crisis económica en 2008. Uno de los más evidentes es el del número de personas con y sin empleo, que no dejó de crecer y descender, respectivamente, en todo el año.

Por ejemplo, la media de afiliados a la Seguridad Social en los 10 primeros meses del año fue de 64.387, un 6,5% más que la media del mismo periodo de 2015. Es decir, a lo largo del año trabajaron cada mes una media de casi 4.000 personas más que el año anterior. Basta con fijarse en los meses de julio y enero para comprobar cuál ha sido la tónica este año: en enero (cuando menos trabajo hay) se registraron 42.295 empleos, unos 3.000 más que 12 meses atrás; en julio (cuando hay más actividad) había 84.749 cotizantes, récord histórico y 5.700 trabajadores más que en ese mismo mes de 2015.

Al mismo tiempo, aumentaron las contrataciones: hasta que comenzó diciembre se firmaron un total de 82.698, un 12,5% más que en similar periodo de 2015. En este aspecto hubo una de cal y otra de arena. Gracias a las inspecciones emprendidas por la conselleria balear de Trabajo volvieron a salir a la luz numerosas contrataciones temporales que en realidad correspondían a empleos indefinidos. De ahí que el número de fijos-discontinuos no haya parado de aumentar, a veces hasta doblarse, como ocurrió en noviembre, cuando subieron un 107%. El lado negativo es el incremento, también espectacular, de contratos cuya duración es inferior a un mes: hasta noviembre se firmaron casi un 30% más que en 2015.

Que la economía pitiusa está embalada quedó reflejado en el informe de coyuntura presentado por la Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears, que fijó en un 4,2% el crecimiento del producto interior bruto (PIB) de Ibiza y Formentera en el primer trimestre del año, y del 4,4% del valor agregado bruto (VAB) en el tercero, según datos del Govern.

Ladrillo reactivado

Ladrillo reactivadoTambién el ladrillo se reactivó, algo que se pudo comprobar especialmente por la disminución del número de parados de este sector y su aumento en las afiliaciones. Pero también por la cantidad de proyectos visados de vivienda nueva, que subieron un 77% en estas islas durante el primer semestre del año. Además, la construcción creció un 107% en los últimos tres años, según las estadísticas de la Asociación de Constructores de Balears.

Pero el calentamiento del ladrillo también tiene un lado negativo. La patronal pitiusa denunció que han llegado a las Pitiusas numerosas empresas de la Península que pagan sueldos míseros a sus trabajadores, algunos de seis, siete u ocho euros por hora de trabajo, empleados que no descansan ni un día a la semana.