Concluida la penúltima jornada de la Liga Nacional juvenil, en su grupo 9, ni la Penya Blanc i Blava ni el Portmany saben si han descendido oficialmente de categoría, ya que todavía no está definido si serán cuatro o tres equipos los que bajen a la competición insular. «Seguimos sin noticias oficiales», declaró ayer Leopoldo Tur, Poldi, entrenador de los blanquiazules. En los mismos términos se pronunciaron desde el club sanantoniense.

Si los conjuntos condenados a descender son cuatro, le tocaría hacerlo al Portmany, al Ferreries, a la Penya Blanc i Blava y al Mahón, que ya no tendrían ninguna opción de remediarlo en la última jornada del campeonato.

En el caso de los dos representes ibicencos, los resultados de este pasado fin de semana los habrían acabado de condenar. El Portmany, tras empatar (2-2) frente al Sporting Ciutat de Palma, y la Penya Blanc i Blava después de caer por 2-3 frente al Manacor B, que con la victoria en Eivissa escapó de la quema.

Sin embargo, si son tres los equipos que bajan, el único que ya tendría claro su descenso es el Mahón. Y casi lo mismo la Penya Blanc i Blava, que guardaría esperanzas para la última fecha de competición, pero que serían muy remotas.

Con 25 puntos, los de Vila tienen tres menos que el Ferreries, que está justo por encima (decimosexto), y que el Portmany (decimoquinto). Deberían ganar y que ninguno de los rivales directos lo hiciera. Se produciría así un triple empate que habría que resolverlo con golaverajes particulares y, en su defecto, con la diferencia de goles a favor y en contra, según explicaron ayer desde la Federació de Futbol de les Illes Balears.

Una cábala muy complicada para la Penya Blanc i Blava, pero algo más factible para un Portmany que dependería de sí mismo para salvarse en la última jornada, en la que recibe en casa al Atlético Baleares. Por su parte, la Penya Blanc i Blava visitará al Platges de Calvià.