Las nadadoras Sara Ramalho, Celia Pascual, Marina Martínez y Nuria Consuegra completaron ayer la travesía entre Formentera y Eivissa, de 18 kilómetros de distancia, en 5 horas y 33 minutos. El proyecto, denominado 'Brazadas de vida', tiene un fin solidario, ya que el objetivo es recaudar fondos para la ONG Proactiva Open Arms, que trabaja ayudando a los refugiados que quieren cruzar el Mar Mediterráneo huyendo de la guerra.

La onubense Celia Pascual explicó que su itención ha sido «llamar la atención sobre la actual crisis de refugiados, nadando en el Mediterráneo, a modo de reivindicación y para denunciar la otra realidad que existe en ese mar».

Todos aquellos que quieran contribuir pueden hacerlo en la página web www.brazadasdevida.org, en la que hay dos formas para ayudar: «Hay un enlace a una plataforma de crowdfounding, donde se pueden hacer donativos, y luego hay otro donde se pueden comprar unas camisetas solidarias», comentó Pascual, que aseguró que la travesía fue plácida porque el mar estaba muy tranquilo y tuvieron muy buen tiempo.

También apuntó que la experiencia fue «increíble» y se mostró feliz por acabar la travesía después de «todo un año trabajando» para ello. «Ha sido una experiencia positiva. A ratos nos hemos fatigado, pero acabamos bien», manifestó Pascual.

Las cuatro nadadoras, que pertenecen al Club Natación Master Madrid, nadaron juntas y dieron rienda suelta a la que es su afición. «Nadamos por placer y no nos dedicamos a esto», dijo Pascual, que ejerció de portavoz de todas sus compañeras.