«Ha sido un auténtico desastre. Hemos hecho un partido horrible», reconoce Fran Inza, entrenador del Harinus Peña Deportiva, que ayer perdió en el partido aplazado ante el Barceloneta por 5-11 y está cada vez más cerca del descenso. «Estamos a nueve puntos de la salvación y ya sería un milagro salvar la categoría», añade el técnico.

El partido ante el conjunto catalán, un rival directo, era una de las últimas opciones de los ibicencos de engancharse a la permanencia. Sin embargo, la Peña no tuvo su mejor día y acabó encajando una severa derrota, que le coloca al borde del precipicio.

«No hemos sabido competir y el partido ya se nos puso en contra a los 30 segundos, cuando encajamos el primer gol. Hemos tenido fallos en defensa de juveniles y encajado goles ridículos, algo que en una categoría como Segunda División B no se debería permitir», señala Inza.

Hundidos

Jorge Gabaldón, con dos goles, Juan Francisco Rodríguez, Álvaro Guisado y Juan Carlos Gambetta fueron los autores de los tantos ibicencos que, sin embargo, no fueron suficientes ni de lejos para inquietar al Barceloneta, que tuvo en el número 8, Álex Bria, a su jugador más resolutivo, con tres goles. Ahora, a falta de siete jornadas para el final de la competición, la Peña está hundida en el último puesto con 14 puntos, por los 23 que suma el Sala 5 Martorell, el equipo que marca la salvación.

«Hoy se nos ha complicado mucho la cosa y, aunque todavía quedan 21 puntos en juego y, por lo tanto, aún quedan opciones matemáticas, hay que reconocer que la permanencia está cada vez más complicada», añade Fran Inza, muy dolorido por la imagen mostrada ayer por su equipo.