Aunque el reloj corre en su contra, el alcalde de Sant Antoni, José Sala, podría en breve ver realizado uno de sus sueños, que formaba parte de su programa electoral y que, según aseguran desde el equipo de gobierno, «es una idea fija» en su cabeza: tumbar la estructura de la discoteca Idea, construida por el desaparecido empresario Xavier Cabau frente a la playa del Arenal. Josefa Costa Ramón, edil de Urbanismo, admitió ayer que está negociando con la propiedad, representada por el abogado Miguel Ángel Roig, para llegar a un acuerdo que pasaría por la demolición «inminente» del inmueble y la cesión por cinco años del solar para su uso como aparcamiento. A cambio, el Consistorio se comprometería a aclarar la situación urbanística de ese terreno, de manera que sus propietarios pudieran sacarle algún rendimiento económico. «De momento se está pactando que sea la propiedad la que pague lo que cueste echar abajo la estructura», explicó la concejala.

Una vez despejado ese espacio, «lo cederían durante cinco años» para ser usado como aparcamiento por parte del Ayuntamiento.

¿Y qué ofrece a cambio el Consistorio? «Puede haber cambios en el Plan General de Ordenación Urbana, claro. Esa parcela es urbana, se puede estudiar, pero todavía no hay nada cerrado», advirtió la edil. Precisamente, el abogado Miguel Ángel Roig explicó en enero en una entrevista a este diario que los dueños del Idea estarían dispuestos a demoler el inmueble si supieran que el dinero invertido en esa obra podría tener posteriormente una recompensa: «Si se tira, no se sabe qué se puede hacer ahí encima», advirtió. A juicio de Roig, el Consistorio tenía que «impulsar el procedimiento que regularizara la situación» urbanística de esa parcela para que en ella cupieran proyectos como la construcción de un hotel, un restaurante o un casino, entre otros. «Pero no se puede hacer nada por la indefinición del urbanismo del municipio, lo que provoca una gran incertidumbre a sus dueños», indicó entonces el letrado.

«En estos momentos se está hablando de presupuestos. Nos tenemos que sentar la semana que viene y a ver si llegamos a algún lado», confió la edil de Urbanismo, que añadió que esas conversaciones «van por buen camino».

«Antes íbamos por la vía administrativa para que lo derruyeran, pero hemos tenido conversaciones y parece que la propiedad está de acuerdo en llegar a un pacto», detalló Costa. En este sentido, el Ayuntamiento instó a demolerlo hace unos meses basándose en la normativa que exige a los propietarios mantener adecentadas y en buenas condiciones las fachadas. «Pero por esa causa no se puede exigir el derribo completo, razón por la que presentamos un recurso e inmediatamente el Consistorio lo estimó», explicó el abogado de la propiedad el pasado mes de enero.

Declaración de ruina

El Ayuntamiento no cejó e inició entonces otro procedimiento de declaración de ruina contra el que los dueños del Idea plantearon otro recurso. «Que un edificio no tenga licencia no es justificación suficiente para que sea declarado ruina. ¿Qué hace falta? Que sean necesarias para su conservación determinadas reparaciones para las que el Ayuntamiento, legalmente, no pueda conceder licencia. Y Sant Antoni no ha dicho qué obras son necesarias reparar», explicó Miguel Ángel Roig. De la falta de entendimiento de hace apenas un mes se ha pasado a unas negociaciones cuyos resultados, según aseguran desde el equipo de gobierno, serán «inminentes».