Los ochenta asociados a la Comunidad de Regantes de Formentera esperan para la próxima primavera, con un año de retraso, poder disponer de agua para el riego agrícola en las casetas montadas a tal efecto en sus campos, que en total suman un centenar de hectáreas. El anterior presidente de este colectivo, Miquel Ribas, cesó en su cargo el pasado mes de noviembre y en su sustitución ha sido elegido Joan Ferrer Yern.

El objetivo de la Comunidad de Regantes de Formentera es que la compañía eléctrica Endesa ponga en servicio la línea eléctrica, cuyas obras están realizadas, para suministrar energía a la planta desaladora del sistema y las bombas de la balsa de riego agrícola, con una capacidad de 88.000 metros cúbicos y que está situada junto a la depuradora de agua residuales.

El coste de las obras de este importante equipamiento han corrido a cargo del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, que ya ha firmado el acta de recepción del proyecto, adjudicada a la empresa Tragsa a finales de 2009 por 8,2 millones de euros. Esta iniciativa comenzó a desarrollarse en 2004 con la financiación del Estado, de la Unión Europea y del entonces Ayuntamiento de Formentera, que compró el terreno donde se levanta la balsa de riego.

El caudal para el riego procede del tratamiento específico de las aguas residuales de la estación depuradora de Sant Francesc, que cuenta con tratamiento terciario, de tipo biológico, que permite este uso del agua.

La Comunidad de Regantes será la encargada de la gestión y el mantenimiento de la red, lo que implicará que tendrá que negociar con la compañía eléctrica una cuota fija por el enganche a la red de suministro de cada uno de sus asociados, más otra variable en función del consumo de cada regante. Según los estudios preliminares el precio que en estos momentos se maneja es de 0,5 euros el metro cúbico de agua.

El expresidente del colectivo de regantes, Miquel Ribas, avanzó que esperan que el Consell contrate a un técnico para el mantenimiento de la red mientras que el coste de funcionamiento es asumido por los asociados a través de las cuotas por consumo que se deberán establecer.

Una obra de 8,2 millones

El coste de las obras de este importante equipamiento han corrido a cargo del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y asciende a 8,2 millones de euros. El Ministerio ya ha firmado el acta de recepción del proyecto, que fue adjudicado a la empresa Tragsa a finales del año 2009.