La organización Élite Corsaris Eivissa desconvocó ayer la protesta convocada el día 28 de agosto para «limpiar Ibiza de taxistas pirata» tras reunirse con la consellera de Movilidad, Pepa Marí, y consensuar una serie de medidas para combatir el intrusismo en el sector. Según el portavoz de Élite Taxi Barcelona, Alberto Álvarez 'Tito', esta movilización contaba ya con el compromiso de «500 taxis y 800 o 1.000 personas» de la Península que iban a desplazarse a Ibiza para plantar a cara a los 'pirata', especialmente los del aeropuerto.

La reunión contó con la presencia de la consellera de Transporte, de los concejales del ramo de los municipios ibicencos, los representantes locales de Élite Corsaris y Alberto Álvarez 'Tito', convertido en líder nacional de este colectivo a raíz de las movilizaciones contra la plataforma Uber. Uno de los principales puntos de acuerdo fue endurecer la vigilancia en el transporte de vehículos turismo con conductor (VTC), «un intrusismo legal», según Álvarez, ya que vehículos que cuentan con licencia para operar en una comunidad autónoma aprovechan para explotar su negocio en otras. Ahora, la ley permite que las VTC puedan dar servicio en otra comunidad un máximo de 18 días durante un trimestre, pero en Ibiza ya hay 167 furgonetas ilegales identificadas y «hasta 300» operando durante toda la temporada, según denunció el miércoles la patronal del sector.

Como primera medida, el Consell prevé abrir una web conjunta con otras administraciones para que controle las actividades de las respectivas VTC de cada comunidad. Inicialmente, se prevé contar con la Generalitat de Catalunya y la Junta de Andalucía para este registro de actividad de los vehículos con conductor, ya que estas dos instituciones también han adquirido este compromiso ante Élite Taxi. Sin embargo, los taxistas confían en que «esto sea el principio para que todas las demás comunidades autónomas se unan y se pueda controlar este intrusismo», apostó Álvarez, quien criticó que «las VTC están incumpliendo de manera reiterada la normativa de la periodicidad máxima permitida para trabajar fuera de su territorio».

La consellera Pepa Marí también avanzó que el Consell de Ibiza presionará ante el Gobierno central para que facilite las herramientas necesarias para combatir el intrusismo. Además, Marí lamentó la escasa presencia policial en Ibiza.

Más policía

«El Estado debe implicarse y cubrir las vacantes policiales, así como tener en cuenta el aumento de la población en verano, sobre todo de cara a luchar contra el intrusismo». En este sentido, se solicita una mayor presencia policial en «los puntos críticos donde se ha detectado una mayor presencia de taxis pirata», anunció.

El Consell también considera necesario «actualizar la formación de las Policías Locales y la Guardia Civil» en las actuaciones contra el transporte irregular. «Entendemos que si hay un control de drogas también se debe castigar expresamente si se detecta transporte ilegal».

Marí también se comprometió ante los representantes de Élite Corsaris Ibiza a «desarrollar el reglamento de aplicación del GPS, que debe servir para mejorar la operatividad en el sector del taxi». «No se aprovechan todas las ventajas de la tecnología para trabajar de una manera más eficiente», lamentó. «Es imprescindible que todas las administraciones y todos los sectores implicados trabajemos de manera conjunta», recalcó la consellera.