Los autores del grafismo del calendario, Daniel y María Balda, se han complicado algo menos este año en las sesiones fotográficas y algo más en la producción. Fotografiaron a los niños con los famosos ante muros en blanco, luego Daniel hizo fotos de las iglesias y al final María lo mezcló todo, multiplicando campanarios, estatuas y ojos de buey para darle un aspecto «más divertido y surrealista», aseguraron ayer. «Espero que la iglesia no se moleste con los cambios, lo hemos hecho con la mejor intención», se disculpó Balda con una sonrisa. Para la portada del calendario seleccionaron varios dibujos de campanarios de Júlia Ribas, una artista que colabora habitualmente con Apneef y que hará próximamente un taller de pintura con los niños. Los resultados serán subastados posteriormente en la subasta de la galería P|Art para recaudar fondos.