El Ayuntamiento de Sant Josep tenía previsto iniciar hoy por decreto la demolición de todas las construcciones ilegales de Casa Lola. Esta mañana, un técnico municipal, junto con un agente de la Policía Local de Sant Josep para levantar acta, acudió al lugar para ejecutar el derribo, aunque nadie ha abierto la puerta del complejo, propiedad de la empresaria Francisca Sánchez Ordóñez. Esta circunstancia obliga al Consistorio a solicitar una autorización judicial para acceder a esta propiedad privada e iniciar la demolición.