Film transparente en los zapatos: el motivo por el que la gente envuelve el calzado en celofán

A veces, objetos que solemos utilizar de forma convencional pueden sorprendernos y tener usos que nunca habíamos imaginado. De hecho, hoy quiero hablarte de algunos usos excepcionales del film transparente de cocina. No sólo sirve para cubrir los alimentos que quieres conservar, sino que puedes utilizarlo para solucionar muchos problemas que te pueden surgir en el hogar o, simplemente, para hacerte la vida más fácil. ¿Tienes curiosidad por saber cómo? Voy directamente a contarte todo lo que necesitas saber.

Seguro que los usos que quiero contarte son todos muy útiles en el hogar. Sólo necesitas un poco de film transparente para resolver diversas situaciones que se presentan a menudo. Recuerda, no olvides estos trucos que seguro te resultarán muy útiles.

El celofán es un film transparente muy resistente que puede convertirse en una auténtica arma secreta en el hogar. Por ejemplo, puedes utilizarlo para crear una trampa para insectos. Este truco puede resultar muy útil sobre todo en verano, cuando los pequeños insectos frugívoros vuelan a menudo por la casa.

El truco para evitar que destiñan los zapatos

Coloca una pieza de fruta en un vaso y cúbrela con film transparente. Haz pequeños agujeros en la superficie para que los insectos puedan entrar en el vaso. Cuando hayas capturado muchos, suelta los mosquitos fuera de la ventana o en el balcón retirando el papel de aluminio del cristal.

También puedes utilizar film transparente para envolver zapatos que necesites llevar contigo. Por ejemplo, si tienes que hacer un cambio de zapatos cuando vas a trabajar o por cualquier otro motivo, lo único que tienes que hacer es envolverlos en un poco de celofán y luego meterlos en una bolsa o sobre. De esta forma, no correrás el riesgo de ensuciar nada con las suelas de tus zapatos y, al mismo tiempo, también evitarás que se ensucien.

Otro uso realmente ingenioso es utilizar el papel de aluminio para sellar frascos y botellas. Basta con poner un poco de lámina en el cuello de las botellas y luego enroscar el tapón. De esta forma, crearás un grosor extra y no habrá posibilidad de que se escape el líquido si derramas las botellas o tienes que transportarlas.