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Fervor fallero en Ibiza con la ‘Geperudeta’

La comunidad valenciana de Sant Antoni culmina un fin de semana de fiesta con la ofrenda floral a la Virgen de los Desamparados y la ‘cremà’

Imagen de la suelta de palomas a la salida de la iglesia. J.A.C.

El momento más emotivo para cualquier fallero es la ofrenda floral a la Virgen de los Desamparados, la patrona de Valencia, durante el 17 y el 18 de marzo. La Plaça de la Mare de Déu, frente a la catedral, queda presidida por una reproducción gigante de la Geperudeta (jorobadita) como se la conoce popularmente por la inclinación frontal de su tronco. La talla va quedando cubierta de un colorido manto de flores que van depositando ambos días las distintas comisiones o fallas. Uno de los ramos procedente de Ibiza.

Este año, la fallera mayor de ‘La Nostra Falla’ de Sant Antoni, Paqui Rodríguez, ha tenido el privilegio de formar parte de la comitiva de la Junta Central Fallera, junto al resto de representantes de los centros valencianos en el exterior, que fueron las encargadas de homenajear a la ‘Geperudeta’ delante de la fallera mayor de Valencia.

"Es un momento que no se puede explicar. Para nosotros es lo máximo"

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«Es un momento que no se puede explicar. Para nosotros es lo máximo», confiesa Rodríguez. Una semana después, vuelve a protagonizar ese honor, junto a la fallera infantil, Sara Alcalde, durante la ceremonia que organiza la numerosa comunidad valenciana de Sant Antoni.

Peregrinación a Valencia

Hay un motivo lógico para que se celebre una semana después. «Casi todos vamos a Valencia del 15 al 19 de marzo», aclara Rodríguez. También hay otra razón de peso en el origen de esta exaltación fallera que toma Sant Antoni todo un fin de semana: «Recordar nuestra cultura y tradiciones que hemos vivido siempre en Valencia y que las conozca la gente, pero, sobre todo, para nuestros hijos», apostilla.

'La Nostra Falla' se fundó en 2000, cuando se prendió la primera falla en ses Variades

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Todo comenzó en 1999 con una peña valencianista. Un año después, nacía ‘La Nostra Falla’ y se prendían los primeros ninots en ses Variades. Tras un par de años de revivir a pequeña escala el fervor de las fallas en Sant Antoni, el círculo se completó en 2003 con la compra de una reproducción de la talla de la Virgen de los Desamparados para la iglesia de Sant Antoni. Desde entonces, la jornada de la cremà en ses Variades da comienzo con la ofrenda floral a la ‘Geperudeta’ de Sant Antoni.

La procesión

Poco después de las doce del mediodía, una comitiva de un centenar de personas, la mayoría de ellas ataviadas con el traje fallero, parte desde el Mercat Pagès animadas por el pasacalles de la Xaranga Alcalde Provenzal, de Lliria.

Un grupo de falleras en la iglesia. J.A.C.

Una vez que llega al templo, abarrotado, el ambiente festivo se vuelve solemne, sobre todo a media que se van depositando las flores a la ‘Geperudeta’ que preside el altar. Muchas devotas lanzan besos a la talla. Una mujer pide a viva voz que los asistentes se pongan en pie para recibir a cada una de las falleras mayores y al presidente de la falla, Raúl Márquez. La mujer pide vítores para todos ellos y acaba sonando el pasodoble de José Padilla en honor a la ciudad del Turia. Tampoco falta el himno de la comunidad.

La ofrenda culmina a la salida del templo con una suelta de palomas y se reemprende la marcha desde la calle Antoni Riquer al son de ‘Paquito el Chocolatero’. Al regreso a la carpa de ses Variades, da comienzo la fiesta con una paella para 200 personas, que continuará con actividades infantiles y música de dj y la charanga hasta la cremà por la noche.

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