El PP suma un diputado más con respecto al sondeo realizado en marzo y pasa ahora a depender de nuevo de Unió Mallorquina (UM) para mantener la mayoría en el Parlament balear y el Govern balear, independientemente de que el diputado de Formentera sea de un partido de izquierda o de derecha. La segunda encuesta realizada por el Grup Marest para Diario de Ibiza en base a un total de 1.800 entrevistas en toda Balears entre los días 20 y 26 abril da 27 escaños al PP, uno más que en la prospección electoral de marzo y dos menos que los obtenidos en los comicios de 2003.

La candidatura de Jaume Matas recuperaría terreno respecto a la de Francesc Antich a costa de un diputado de la coalición de izquierda de Eivissa PSOE-Eivissa pel Canvi, que en marzo obtenía siete diputados, dos más que en 2003, y ahora baja a seis. En este sentido, hay que tener en cuenta que el sondeo se realizó los días previos a que saliera a la luz pública el contenido de las grabaciones supuestamente realizadas por el ex secretario general de la FSP-PSOE, Roque López, en las que éste explica a dirigentes socialistas que el partido podría haber cobrado comisiones de la constructora Brues SA por la ejecución del proyecto Eivissa Centre y que han generado una polémica de imprevisibles consecuencias.

En Eivissa se lograría un empate técnico, con una diferencia de sólo un punto en favor de la izquierda, con el 48,1 por ciento del escrutinio, lo que supondría seis diputados de PSOE-Eivissa pel Canvi y seis diputados del PP en la cámara balear. En este caso, también se desconoce el escaño de Formentera dada la exigencia del tamaño de la muestra necesario para obtener resultados fiables en un censo de reducido tamaño.

Insuficiente para la izquierda

El PSOE mantiene los 16 escaños, uno más que en 2003, pero pierde dos puntos del escrutinio con respecto al sondeo electoral efectuado a finales de marzo, pasando del 27,4 al 25,6 por ciento del total de votos en Balears. El Bloc mantiene cinco escaños y el PSM de Menorca sigue con un representante. Todos los partidos de la izquierda suman 28 escaños y, por tanto, se quedan a las puertas de la mayoría absoluta. En estas circunstancias, el diputado por Formentera ni siquiera le vale para inclinar la balanza en su favor, por lo que sería necesario un acuerdo con Unió Mallorquina, tal y como sucedió en 1999, para que Francesc Antich ocupe de nuevo la presidencia del Govern balear.

En la prospección realizada hace un mes, el PP retrocedía por la caída que sufría en Eivissa, con la pérdida de dos parlamentarios. Ahora, sin embargo, la derecha ha frenado la caída y recupera terreno. En el caso de Mallorca se mantienen los mismos resultados que hace un mes, aunque el PP gana un punto del total del escrutinio (43,3 por ciento y 15 diputados), mientras que el PSOE pierde dos puntos (27,3 por ciento y 10 representantes). El Bloc y UM mantienen sus cinco y tres diputados, respectivamente, con respecto a la consulta de hace un mes, pero aumentan en casi un punto el porcentaje de votos obtenidos. En Menorca, el PP y el PSOE obtienen seis escaños cada uno, mientras que el PSM inclina la balanza en favor de la izquierda. En este sondeo el PSM sube dos décimas con respecto al efectuado en marzo en detrimento de los dos grandes partidos. El PP pierde un punto y el PSOE, dos y medio.