Tanto el Govern balear como los representantes empresariales de las Pitiusas coinciden en que la prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por el coronavirus hasta el 30 de septiembre, aprobada ayer por el Consejo de Ministros, es insuficiente para un destino turístico como Balears. Por su parte, el sindicato UGT, uno de los firmantes del acuerdo, junto con CCOO y las patronales CEOE y Cepyme, advierte de que las negociaciones han dejado la puerta abierta a que puedan alargarse en el último trimestre de 2020.
El Govern balear mostró ayer su satisfacción tras aprobarse la ampliación de los ERTE, pero indicó que seguirá reclamando al Ejecutivo central que se prolonguen hasta el 31 de diciembre. No obstante, el conseller de Modelo Económico y Turismo, Iago Negueruela, destacó que «sí queda garantizada hasta el 31 de diciembre la prestación por desempleo para los fijos discontinuos».
El presidente del PP balear, Biel Company, reclamó que los ERTE deben ampliarse hasta final de año para «evitar despidos masivos» y «salvar las empresas». También lamentó que el Gobierno central no ha atendido «ninguna reivindicación de calado para Balears».
En este sentido, el presidente de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef), Alfonso Rojo, también lamenta que no se haya tenido en cuenta la propuesta que elevó al Gobierno central la Mesa del Diálogo Social de Balears, compuesta por patronales, sindicatos y el Govern.
La realidad turística
La realidad turística
«Pedíamos un ERTE específico que tuviera en cuenta la realidad del sector turístico, porque nosotros, como mucho, solo vamos a tener tres meses de temporada», recordó Rojo.
El presidente de Pimeef valoró que «ya tenemos una fecha que antes no teníamos» tras la aprobación de ayer, así como que estos ERTE pueden ser muy favorables para los sectores que puedan volver a la normalidad en pocos meses. «Pero nosotros, en invierno no podemos generar empleo, necesitamos un ERTE diferente», subrayó. «En vez de animar a abrir a las empresas, vamos a estar penalizados», concluyó.
Por su parte, la presidenta de la Federación Hotelera de Ibiza y Formentera, Ana Gordillo, destacó que «es una buena noticia esta prórroga». «Pero hay un descontento, porque pedíamos que se hubieran mantenido hasta final de año, sobre todo aquí que es tan frecuente la figura del fijo discontinuo». Gordillo también subrayó que, además de los ERTE, el sector turístico necesita «políticas para llevar esta situación de la mejor manera posible, dando liquidez a las empresas que lo necesiten».
«Según vaya el verano, podemos tener por delante un invierno muy duro, con lo que se debe ayudar tanto a las empresas como a los trabajadores, para que no se destruyan empresas ni empleos», indicó. Así, recordó que «Balears fue de las comunidades que más aportó en la crisis de 2008», para reclamar que se tenga en cuenta que el tejido social de las islas se verá más perjudicado si no se endereza la temporada turística.
No obstante, Gordillo también mostró su confianza en que pueda encontrarse una vacuna para el Covid-19 en los próximos meses, «porque significaría que el año que viene sería una gran temporada».
