La conselleria de Cultura del Govern ha firmado un convenio con la Federación Pitiusa de Razas Autóctonas (Fepira) para introducir una pequeña manada de cabras y ovejas de raza autóctona en el recinto arqueológico de Puig des Molins del Museo Arqueológico de Eivissa y Formentera. El proyecto, que tiene como objetivo recuperar la ganadería tradicional, tiene además la ventaja de que los animales pacerán las vertientes del monte y eliminarán, de forma «ecológica, sostenible, económica y cíclicamente», la enorme cantidad de vegetación herbácea y arbustiva que cubre la zona, según destaca el Ejecutivo balear en un comunicado.

Esta vegetación se convertía cada verano en un grave riesgo de incendio y por este motivo cada año se tenían que dedicar cantidades importantes para la limpieza a fin de eliminar este peligro.

Los primeros animales llegaron la semana pasada y la manada se irá completando en los próximos días. Primero tienen que pasar un periodo de estabulación, en el establo construido expresamente.

Cuando se hayan aclimatado al nuevo hábitat, podrán salir para ir paciendo las vertientes del monte como se hacía tradicionalmente.

Según recuerda el Govern, el Puig des Molins fue la necrópolis de la ciudad de Eivissa durante toda la Antigüedad y a partir de la Edad Media se convirtió en un espacio agrícola, carácter que mantuvo hasta los años setenta del siglo XX. Por sus conocidos valores históricos y arqueológicos forma parte de la declaración de 'Ibiza, Patrimonio de la Humanidad' concedida por la Unesco, y además es casi el único espacio natural que queda dentro del casco urbano de la ciudad.

Una de las actividades tradicionales que se habían practicado y que a lo largo del siglo XX fue desapareciendo es la ganadería. Los campesinos que habitaban la casa de es Porxet, conservada en la cumbre del monte, poseían una pequeña manada de cabras y ovejas que pacía por la zona.

Por eso, en el marco de este proyecto de recuperación progresiva de los valores y actividades tradicionales del lugar, «fue una buena idea» volver a introducir esta actividad y, además, hacerlo potenciando la ganadería autóctona de Ibiza y Formentera, ha señalado el Govern en su nota.