El acceso por la línea de costa desde la playa de ses Boques a la de es Niu de s'Aguila, en es Cubells, ha sido cerrado por un particular para consolidar la ladera del acantilado y evitar que un chalé siga avanzando hacia el mar. Las barreras que cortan el paso en esta zona de domino público informan del riesgo de desprendimientos, aunque el Ministerio de Transición Ecológica no ha sido capaz de confirmar desde el pasado mes de agosto si estas obras cuentan con autorización.

Vallado

Para llevar a cabo estos trabajos, se han instalado unas vallas y cadenas en el extremo oriental de es Niu de s'Àguila y en la parte occidental de la playa de ses Boques. En ambos casos, la protección parte desde la pared del acantilado y aprovecha el muro natural que forman unas rocas cercanas a la orilla para impedir por completo el acceso. Sobre estas verjas se exhiben letreros con la señal de prohibido el paso por el riesgo de desprendimientos, sin que vengan acompañados de ningún sello ni autorización de la Demarcación de Costas.

También figura el nombre de la empresa de trabajos verticales que lleva a cabo estos trabajos, en cuya página web se detalla que se trata de la consolidación del acantilado a causa de «un deslizamiento activo por debajo de una vivienda construida en primera línea de costa».

Una familia atrapada por la tormenta en es Cubells

Una familia atrapada por la tormenta en es Cubells

Una familia se quedó atrapada por la tormenta en es Cubells en 2017

«Se trata de un material muy disgregado aportado mayoritariamente de forma artificial que desliza sobe unas margas muy húmedas y alteradas», detalla el blog sobre los proyectos de esta empresa, que da explicaciones de todo el proceso de anclaje de este suelo. Además del anclaje, el terreno se ha cubierto con una «malla de protección antierosiva» y «cable metálico de refuerzo·.

Un portavoz de la empresa informó ayer de que ya han llevado a cabo más trabajos de consolidación en los taludes de la zona de es Cubells. También señaló que han vallado la zona de la playa para crear una franja de protección ante los desprendimientos que puedan producir los trabajos y que éstos cuentan con las respectivas licencias para llevarse a cabo.

No obstante, la empresa no pudo precisar si la propiedad cuenta con la autorización de Costas para cerrar la playa. Esta misma petición se ha realizado ante el Ministerio de Transición ecológica hasta en cuatro ocasiones, sin que se haya recibido respuesta hasta el momento.

Sin respuesta de Costas

El 20 de agosto, desde el gabinete ministerial se anunció que en unos días podría confirmar si el cierre del paso entre estas playas contaba con el visto bueno de la Demarcación de Costas.

Tras una nueva solicitud el 4 de septiembre, el Ministerio respondía un día después que mandaría la respuesta pertinente en cuanto la recibiera. El 27 de diciembre, se volvió a enviar de nuevo el mismo requerimiento, aunque en esa ocasión ya no hubo ninguna contestación al correo electrónico. El último intento de obtener información fue ayer, por vía telefónica, cuando desde el gabinete ministerial constestaban que volverían a presentar la petición, además de escudarse en la lentitud con que los trámites llegan a los técnicos de los departamentos.

Cuatro décadas de desprendimientos

Cuatro décadas de desprendimientos

En la costa de es Cubells ya se han producido más casos de viviendas que han tenido que consolidarse con anclajes sobre el terreno para evitar que se deslicen hacia el mar, además de los desprendimientos de rocas que han causado numerosos destrozos tanto en las fincas como en la carretera durante episodios de fuertes lluvias.

De hecho, una de las vecinas más ilustres de la zona, la actriz Úrsula Andress, abandonó su chalé en 1977 después de una tromba que sepultó buena parte de su propiedad. El año pasado. El camino de es Cubells también permaneció cerrado tras las riadas de agosto de 2017 y hasta principios de verano del año pasado, hasta que el Govern autorizó su reapertura tras las obras de consolidación de la urbanización