La Unió de Pagesos y la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) han pedido al Govern balear que se destinen inversiones del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) para mejorar infraestructuras de agua regenerada para el riego agrícola en Balears. La demanda se basa en el plan que facilitará la reutilización de aguas residuales tratadas para el riego agrícola y así contrarrestar la escasez en épocas de sequía, directriz que fue aprobada el pasado martes en el Parlamento Europeo.

En las Pitiusas, Formentera está a la cabeza del plan ya que, gracias al censo de tierras y a la inminente puesta en marcha del sistema de riego con aguas depuradas, se podrán regar 114 hectáreas. En cambio, en Ibiza, este sistema alcanza a 85 hectáreas, según los datos facilitados ayer por ambos colectivos.

Para el gerente de Asaja, Joan Simonet, «no es que veamos favorable priorizar el uso del agua, sino que es imprescindible» y detalló que si «esta iniciativa se traslada a la normativa estatal y autonómica con medidas de impulso real y no de humo será un elemento más para que se mantenga la agricultura» en Balears.

En términos más concretos, por lo que respecta a los terrenos regados con agua depurada, hay 2.820 hectáreas en Mallorca, 691, en Menorca, 85, en Ibiza y 114 en Formentera.