La peligrosísima carretera de Santa Eulària se cobró su primera del año el mismo 1 de enero. Sobre las diez y media de la noche, Dylan Hunt, un chico que acababa de cumplir los 14 años de edad, de origen galés y residente en la isla, estaba cruzando la carretera cuando fue arrollado por un Ford Fiesta en la que viajaba una familia, según informaron desde las oficinas de prensa de la Guardia Civil y desde el Ayuntamiento de Santa Eulària.
El joven regresaba de las vacaciones de Navidad junto con su familia. Fueron a recogerlos al aeropuerto y acababan de aparcar frente a Can Beya. Él y su madre se dispusieron a bajar del vehículo para trasladar sus maletas a otro coche, que estaba aparcado junto a una vivienda situada al lado del restaurante, que en ese momento estaba cerrado.
Una vez realizada esta operación, el plan era continuar viaje hasta Sant Antoni, donde reside esta familia de origen británico. Al parecer, acostumbraban a utilizar esta fórmula cuando regresaban a la isla de sus vacaciones.
La mujer cruzó primero la calzada y después escuchó un fuerte golpe a su espalda. Al girarse vio que su hijo había sido embestido por un turismo, según explicaron fuentes del servicio de emergencias del 112.
Los agentes del equipo de Atestados de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de las Pitiüses se encargaron de la investigación del suceso, si bien al lugar también acudieron los miembros de al menos una patrulla de la Policía Local del municipio de Santa Eulària.
En cuanto a las causas del accidente, hay pocas dudas de que la responsabilidad fue de la propia víctima, ya que se encontraba cruzando la carretera de noche, con ropas oscuras y sin el preceptivo chaleco reflectante. Se trata de una zona en la que la visibilidad es reducida, ya que hay cambio de rasante. Además, en ese momento había niebla, lo que dificultaba aún más la visibilidad.Pruebas de alcohol y drogas
Pruebas de alcohol y drogasEn el Ford Fiesta que arrolló al joven galés viajaban tres personas, una de ellas menor de edad. Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico sometieron a las pruebas de la alcoholemia y de las drogas a la persona que se identificó como conductor del coche, que dio negativo en las dos.
Sin embargo, debido a varias circunstancias, los agentes de Atestados pronto sospecharon que, en realidad, podría ser la otra persona quien iba el volante. Al parecer, fue así, y la persona que en realidad conducía acabó reconociéndolo. En consecuencia, los guardias civiles de Tráfico sometieron a esta persona a las pruebas del alcohol y de los cinco tipos de sustancias estupefacientes.
Esta persona dio positivo en uno de ellos, en concreto en metanfetaminas.
Dylan Hunt es la primera víctima mortal en accidente de tráfico del año 2019 en las carreteras de Ibiza y Formentera.
Motoristas
MotoristasEl año pasado fallecieron quince personas en accidentes de tráfico en las Pitiüses. Nueve de los estos quince fallecidos en 2018 iban en moto. El último accidente mortal ocurrió el 25 de diciembre. Falleció un motorista de 24 años de edad en la carretera que une Eivissa con Sant Josep (la EI-700). La víctima chocó con su moto contra un turismo tras realizar una maniobra incorrecta en el kilómetro 3,5 de la EI-700.
En cuanto a la siniestralidad vial en el conjunto del archipiélago, la cifra regresó el año pasado a mínimos históricos. De los 48 fallecidos que había a fecha de 27 de diciembre, más de la mitad, 25, iban en moto.
