Un tribunal popular juzgará la próxima semana a tres hombres acusados de torturar y asesinar por encargo a un narco en Ibiza. El cadáver de la víctima apareció apuñalado y enterrado en es Fornàs, en Sant Antoni, dos semanas después del crimen, en septiembre de 2011.
La fiscalía reclama para dos de ellos sendas condenas de 26 años de reclusión como autores materiales del crimen y 20 para el otro como cooperador necesario. Está previsto que el juicio se celebre a partir del lunes en la Audiencia de Palma y se prolongue durante toda la semana.
La investigación de la Guardia Civil apunta a que el asesinato de José Julián del Río Cardona, colombiano de 34 años y conocido como ´Carlos´, fue ordenado por una persona -actualmente en paradero desconocido- para ajustar cuentas por una deuda relacionada con el tráfico de drogas. Del Río convivía además con la expareja del individuo que habría encargado su muerte.
Un plan para matarlo
Así, según el relato de acusación de la fiscalía, los tres procesados urdieron un plan para matarlo. Uno de los acusados Francisco A.A., de 37 años, se citó con la víctima en el parque de bomberos de Ibiza el 1 de septiembre de 2010 por la tarde. Cuando ´Carlos´ llegó al lugar en su vehículo, el sospechoso se montó en él y le dio indicaciones para llegar al lugar en el que había quedado con los otros dos procesados, José R.P., de 46 años, y Luis Francisco M.A., mozambiqueño de 48.
Cuando llegaron al punto indicado, la finca es Fornàs de Dalt, en el camino de Benimussa (Sant Antoni), los tres procesados se abalanzaron sobre la víctima y mientras uno la estrangulaba, los otros le propinaron varios golpes en la cabeza, causándole fracturas en la mandíbula y los huesos de la nariz. ´Carlos´ recibió también varios golpes en el tórax, el abdomen y la cabeza. Finalmente, los autores del crimen le asestaron una cuchillada en el pecho. El hombre falleció debido a un colapso pulmonar que le causó una insuficiencia respiratoria aguda. La fiscalía sostiene que los asesinos se ensañaron con él.
El cadáver de la víctima fue hallado enterrado en un paraje de Benimussa el 17 de septiembre. La Guardia Civil culminó las pesquisas cinco meses después, el 8 de febrero de 2011, cuando llevó a cabo una gran redada en el barrio de sa Penya. Los agentes arrestaron a 21 personas, varias de ellas por su implicación en el crimen y el resto por tráfico de drogas y robos.
La fiscalía sostiene que los hechos constituyen un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento y considera a José R.P. y Luis Francisco M.A. autores materiales, mientras que a Francisco A. A. le otorga el papel de cooperador necesario y le aplica la atenuante de confesión por haber ofrecido a la Guardia Civil datos fundamentales para resolver el asesinato. Por ello reclama sendas condenas de 23 años de prisión para los dos primeros y 20 para el tercero.
El ministerio público ofrece, sin embargo, una calificación alternativa sobre la participación de Francisco A.A., según la cual recibió el encargo por parte de los otros dos sospechosos de localizar a la víctima y la llevó al lugar acordado, pero no participó de forma decisiva ni intervino en ninguna otra acción en su asesinato. En este caso le considera cómplice del crimen y reclama once años de prisión para él.
El juicio se celebrará a partir del próximo lunes en la Audiencia Provincial de Palma con la elección de los miembros del tribunal popular. La vista se prolongará durante toda la semana y concluirá el lunes 10 de noviembre, de acuerdo con el calendario previsto.
