El juez decano de Ibiza, Juan Carlos Torres, ha denunciado la «insalubridad» de los dos calabozos ubicados en el sótano del edificio judicial de la avenida de Isidor Macabich de Vila. «El ambiente es insalubre y a veces irrespirable», comentó Torres, que invitó a Diario de Ibiza a visitar las dependencias.

El jueves y el viernes de la semana pasada una gerente del Ministerio de Justicia también efectuó un recorrido por el vetusto edificio, acompañada por la secretaria judicial del Decanato, en la que detectó las importantes carencias y defectos del inmueble, según detalló Torres.

Por este motivo, el decano tomará medidas. La primera, según explicó, será solicitar a la Gerencia que pida la ampliación del número de calabozos. «Me conformaría con uno más, pero lo ideal serían cuatro», apuntó Torres. Los dos primeros seguirían usándose como hasta ahora, uno para hombres y otro para mujeres. El tercero albergaría a los presos trasladados desde la cárcel y el cuarto a otros con determinadas características, como su peligrosidad o su toxicomanía.

«La gerente comprobó el mal olor», explicó Torres, que asegura desconocer las condiciones higiénicas en las que están los arrestados. La procedencia de las personas que llegan detenidas es la prisión de Can Fita, la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía o alguno de los cuarteles de la Guardia Civil de Ibiza o de Formentera.

«Voy a solicitar que se coloque un sistema de ventilación, extracción y renovación del aire continuo», anunció el decano. En los dos calabozos actuales no existe ninguna instalación de este tipo. El decano también se pregunta si se sigue algún programa de fumigación. «Lo desconozco», aseguró. Este diario ha podido saber que en los calabozos es frecuente la presencia de insectos, incluidos cucarachas y ácaros.

Torres, que lleva 28 años trabajando en Eivissa, explicó que hace mucho tiempo, cuando aún no estaban construidos los calabozos, los detenidos esperaban en salas de vistas con aire acondicionado, con custodia policial. El decano planteó retomar este sistema como una solución transitoria. «Si alguien me lo pide, habilitaré una sala de vistas», anunció.

Pide más visitas a los juzgados

Por último, Torres lamentó su falta de tiempo para ocuparse de estos asuntos, que, recalcó, no son de su competencia. «Yo no soy un técnico, soy un juez. ¿Por qué la Administración no realiza más visitas a Ibiza para observar y subsanar las deficiencias?», se preguntó para finalizar.

El juez decano es además el titular del Juzgado de Violencia Sobre la Mujer de Ibiza, uno de los que más carga de trabajo tiene en la demarcación judicial.