­Un turista austriaco de 21 años que hacía una excursión en barco con sus amigos falleció el miércoles por la tarde después de mezclar alcohol con éxtasis (MDMA). El joven comenzó a sentirse mal a bordo. Un hombre intentó reanimar a Stefan Schauer en la zona des Trucadors, cerca del paso que separa Formentera de s’Espalmador. El 061 recibió un aviso a las 20.05 horas y hasta el lugar del suceso se desplazó una ambulancia tipo UVI móvil. Los sanitarios practicaron maniobras de reanimación durante hora y media pero resultaron infructuosas. Schauer falleció a causa de una parada cardiorrespiratoria, según informó el 061.

El joven llegó a Formentera a bordo de una embarcación que organiza excursiones náuticas con fiesta a bordo, procedente de Sant Antoni. El equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación, se entrevistó con los amigos de Schauer, que reconocieron que este había bebido varias copas de alcohol y que había consumido casi dos gramos de sustancias estupefacientes.

Hasta el lugar del suceso, alejado aproximadamente un kilómetro del camino transitable más cercano, se acercó, además de los agentes del instituto armado y de los servicios de emergencia, el juez de paz de Formentera, que decretó el levantamiento del cadáver a las 22 horas. Hoy está previsto que se realice la autopsia en el Anatómico Forense de Ibiza.

Fuentes del Restaurante Juan y Andrea confirmaron ayer que la Policía Local de Formentera se puso en contacto con los responsables del establecimiento para solicitar su ayuda para transportar el cuerpo del austriaco, ante la ausencia de otros medios. Una lancha neumática de este restaurante de la playa de ses Illetes realizó el traslado finalmente desde la playa des Trucadors hasta el camino más cercano, donde los servicios funerarios transportaron por tierra el cuerpo hasta el depósito municipal.

«Barra libre desinhibidora»

En una de las webs que promocionan este tipo de fiestas a bordo de un barco, que parten de diferentes puntos de Ibiza rumbo a Formentera y que cuestan entre 60 y 120 euros, se define la actividad como «excursiones al ritmo de la música». «El alcohol, que corre alegremente gracias a la barra libre, cumple su función desinhibidora», se puede leer en otro apartado de esta página.

Alejandra Ferrer, consellera de Turismo de Formentera, comentó ayer tras conocer la noticia que se sentía «consternada». «Este suceso ha sido muy grave y hay que poner solución», añadió. Ferrer avanzó que el Consell se pondrá en contacto «con los organismos competentes» para que terminen con este tipo de excursiones, «que provocan mucho ruido [los barcos tienen un equipo de sonido y dj a bordo] y que ofrecen barra libre, por lo que desembarcan a sus pasajeros en estado ebrio».

La consellera subrayó que tiene noticia de al menos tres empresas que realizan estas actividades. «En el Parque Natural las únicas excursiones permitidas son las de carácter naturalista», advirtió. La responsable de Turismo informó de que ha recibido quejas de establecimientos de la zona, «motivadas por el ruido de la música que emiten estas barcas».