Entre todos la mataron y ella sola se murió

David Ventura

David Ventura

Una lengua se está muriendo y es el eivissenc -siendo el eivissenc, obviamente, el catalán que se habla en la isla-. No busco culpables ni presento ningún estudio, me baso en algo tan poco científico como las conversaciones de mi hijo con sus amigos. Son niños de padres catalanoparlantes, estudian en una escuela rural donde la lengua vehicular es el catalán, pero entre ellos hablan en castellano. El eivissenc está en las aulas, pero no en el patio. Es una lengua administrativa pero no es la lengua de la diversión. Justo lo contrario que durante mi infancia, cuando el catalán molaba: los mejores dibujos animados y programas musicales eran los de TV3 (Bola de Drac, Sputnik). No sé por qué, alguien decidió dejar de doblar al catalán los dibujos animados. El inmenso mundo de youtubers y streamers, al igual que la música pop, el trap y el urban, es completamente en un castellano mestizo, medio caribeño. En esta ecuación, el eivissenc no entra. Ignoro la solución, pero a la lengua propia de esta isla no le quedan más de tres décadas de vida antes de convertirse en algo residual y folclórico. Será un drama, una tragedia cultural, pero tampoco es el fin del mundo. Una lengua muere cuando un pueblo decide dejarla morir. La vida sigue y ya veis a los irlandeses: olvidaron el gaélico pero siguen siendo tan irlandeses como siempre.

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