«Disfrutar y fer festa» en la frita de Sant Jordi más multitudinaria

El olor a comida desde donde hay sitio para aparcar (un poco lejos) apenas dadas las doce y media de la mañana, ya es una señal de que en esta frita hay muchos participantes y más comida. Una frita de matances lleva: «Carne de cerdo de varias clases, patatas fritas y pimientos rojo y verde», cuentan en la colla ‘Bigarrats’, formada por María José, Lina, Xicu, Juan Antonio y Jordi, que también añade pebrassos a su receta y se presentan por primera vez tras tener «una idea maravillosa alrededor de una mesa», que, según Lina, es: «Donde nacen las buenas ideas». Se han apuntado para «disfrutar y fer festa» y con un porró de vi sobre la barra de su puesto, ofrecen un trago a quienes les dejen una «monedita» para la recaudación solidaria.

El alcalde de Sant Josep, Vicent Roig, confirma que la cuarta edición de Sant Jordi va de Frita bate el récord de participación después de que tuvieran que ampliar las plazas de inscripción. Del máximo de 30 puestos que habían ofrecido, al final 35 colles se han podido unir a esta celebración ‘interestelar’.

Para adaptar el espacio han llegado a ubicar colles en el aparcamiento que hay entre la plaza de Sant Jordi y Can Sala. Roig afirma que están «muy contentos» con la gran participación que han tenido: «Esto significa que es una fiesta muy consolidada», aunque, añade: «Igual los próximos años tendremos que hacer algún sorteo, porque la plaza no da para mucho más, y todos los que acuden tienen que poder disfrutar». La afluencia y la dedicación de los participantes son motivo de alegría para Roig, ya que «no sólo es cuestión de preparar la frita sino de que cada participante tenga su espacio para su gente, sus invitados, su picoteo...».

Además de los platos de las colles, se prepara una frita popular, con raciones de pan, bebida y postre por 15 euros para poder alimentar hasta a 600 personas. Todos los beneficios recaudados en esta jornada se destinarán a apoyar la labor de Cruz Roja, que cuenta con aproximadamente 50 voluntarios: «Para que todo salga perfecto», añadía Roig.

Pasado el mediodía, la multitud empieza a acumularse frente a los diferentes puestos, para conseguir algo de bebida y un poco de sombra, mientras finaliza la exhibición de baile payés del Grup Folklòric de Sant Jordi. Tras ellos, la Banda municipal de Sant Josep le ofrece al caluroso ambiente un toque de magia, tocando la melodía de canciones de películas infantiles, como ‘Aladdín’ o ‘Shrek’.

Sandra Dengra, voluntaria de Cruz Roja, pasea entre la gente ofreciendo la participación en un sorteo a cambio de un euro. Se rifan: «Una cesta de quesos, embutidos y paté de Can Sala, un kit de cosméticos de Zara y una cena en cualquier restaurante de Sant Jordi».

Cerca de ella, se encuentra el puesto de María, Lucía y Andrea, las jóvenes que forman ‘Pageses i Murcianes’, el grupo que ganó la frita del año pasado. Están cocinando porque les toca entregar su plato a las 14.30 horas. Según se ha sorteado puesto a puesto, han escogido un sobre en el que figuraba la hora a la que tendrían que acercar su plato a la Oficina municipal de Sant Jordi para ser juzgado. Cuentan con más de 10 kilos de carne de cerdo, entre la que hay costillas, cuello, un poco de hígado y panceta y muchas patatas y pimientos para cautivar el paladar del jurado. Este año vienen con mentalidad de pasárselo «muy bien», primero de todo, pero también: «Ojalá revalidar», afirma Lucía. Están contentas porque, en comparación con el año pasado «hay muchos más grupos, y de gente joven», añaden apuntando que con su anterior participación, consideran que han conseguido rejuvenecer el concurso.

El grupo ‘Que cocine él’ también se presenta por segunda vez y tiene experiencia triunfadora. El año pasado ganaron el campeonato de arroz a banda de Sant Antoni y le siguen teniendo a él, a Julián, el único hombre y cocinero del grupo. A su lado, sus acompañantes cuentan que se apuntan a todo lo que puedan: «En principio participamos, nos lo pasamos genial todos juntos y, como confiamos en él, porque es buen cocinero, expectativas todas».

Esta atmósfera también la desprenden otras casetas: «Este año venimos a tener una segunda oportunidad y a conquistar Sant Jordi, que es nuestro pueblo», cuenta Issac del grupo ‘Xicu Chef’, que se ha animado a preparar dos fritas para poder saciar a la mayoría de sus conocidos, y los siete u ocho integrantes de la colla.

David Ferrer, de casa Aniseta, ofrece un chupito de hierbas de can Aniseta, «a cambio de la voluntad». Él y sus amigos se presentan por segunda vez: «Primero de todo, porque la mayoría somos jordiers, y segundo, porque nos gusta hacer frita, nos gusta comer... Pero la fiesta es lo mejor». En su caso, han hecho una previsión de cuánta bebida y comida traer, calculando alimento para unas 15 personas, pero para conseguir unas 30 raciones: «Porque son 15 raciones muy grandes y aquí sacas platos pequeños», cuenta Ferrer. Han comprado cinco kilos de carne, seis pimientos verdes y seis rojos y han pelado ocho kilos de patatas, pero «por el momento, no se han usado todos».

Cerca de las cuatro de la tarde, los últimos platos que quedan por dar a probar al jurado llegan a las oficinas del Ayuntamiento, para a las cuatro y media poder empezar a felicitar a los ganadores: ‘Ses fites van de Frita’, en primer lugar, ‘Margalides & Geranios’, en segundo puesto y ‘Fart and Furious’, terceros.

Con el trabajo hecho, barrigas llenas, reconocimientos concedidos y premios entregados, ahora ya sólo queda hacer aquello a lo que se ha venido: disfrutar del día.

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