Llama la atención

El angustiante rescate de los migrantes abandonados a su suerte por un taxi-patera a los pies de los escarpados acantilados de la Mola, entre los que se encontraban tres niños muy pequeños (de uno, dos y cinco años). Los bomberos les tuvieron que subir con cuerdas y poleas ayudándoles a vencer el miedo en una intervención en la que rescataron primero a una de las madres para que pudiera atender a los pequeños.

Que Sant Joan no haya tenido, hasta ahora, una agente mujer en su Policía Local, según explicó el Ayuntamiento en la presentación oficial de la nueva incorporación.

Que la comisión de seguimiento de los Don Pepe, lejos de resolver dudas y comenzar a solucionar la situación, deje la sensación de que, cuatro años después de que los vecinos tuvieran que abandonar sus viviendas porque el edificio amenazaba ruina, haya que volver al punto de partida, para desesperación de los afectados.