Temporal en Ibiza: Nelson se come ses Salines

El temporal de lluvia y viento que ha azotado buena parte de España durante la Semana Santa se cebó este lunes especialmente con ses Salines. Con muchos menos paseantes que cualquier domingo soleado, incluso en pleno invierno, la playa de Migjorn ofrecía al mediodía una imagen desoladora en uno de sus tramos. En la parte más cercana al muelle de sa Canal, la borrasca Nelson prácticamente había engullido la orilla, así como toda la arena de la superficie.

En cambio, a los pies de las dunas centrales, el fuerte oleaje causó menos estragos y algunos niños podían disfrutar construyendo castillos de arena o jugando a fútbol. Eso sí, al igual que durante todos los días pasados, la mala mar provocada por el vendaval (y la bandera amarilla en la torre de vigilancia) desaconsejaba por completo animarse al baño.

El viento de suroeste soplaba a una velocidad de 25 kilómetros por hora, para mayor desesperación de todos aquellos que han recalado en la isla esperando encontrarse con un anticipo del verano. El temporal también acabó arruinando la noche del sábado a todos aquellos residentes y turistas que esperaban disfrutar de los conciertos programados en la playa de s’Arenal, en Sant Antoni, donde tuvo que cancelarse el festival Rock Nights.

Para la jornada de este martes, aún se notarán los coletazos de Nelson, aunque con menor intensidad. Así, el viento seguirá soplando, con menos fuerza, y el sol lucirá durante casi todo el día.

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