El turismo balear ante el espejo del cambio climático

Expertos reunidos en el Foro Económico y Social del Mediterráneo instan a medidas urgentes para integrar prácticas realmente sostenibles en el sector turístico frente a la amenaza inminente del cambio climático

Algunos turistas visitan Dalt Vila

Algunos turistas visitan Dalt Vila / Vicent Marí

Alberto Fraile Oliver

En un contexto global marcado por los desafíos del cambio climático, la región mediterránea se encuentra ante una encrucijada existencial. La necesidad de transitar hacia un modelo de turismo sostenible se ha convertido en una prioridad indiscutible, tanto por la preservación del patrimonio natural como por la propia viabilidad económica de las actividades turísticas costeras. En este escenario, el Foro Económico y Social del Mediterráneo, impulsado por el Grupo Prensa Ibérica, emerge como una plataforma esencial para dialogar y proponer soluciones concretas ante retos de dimensiones desconocidas.

La primera mesa de debate de la jornada, moderada por Antoni Riera, director de la Fundació Impulsa y comisario del foro, puso de relieve la urgencia de realizar mediciones de huella de carbono en todos los alcances de la cadena de valor del turismo, porque solo con buenos datos y una buena interpretación de los mismos se puede desarrollar el plan de descarbonización de las empresas.

Marisa GoñiCristina Martín, anfitrionas del encuentro y directoras de Diario de Mallorca y Diario de Ibiza respectivamente, señalaron la importancia de la iniciativa para Balears. “La intersección del turismo y el cambio climático en el Mediterráneo requiere una atención inmediata y acciones concretas. Este foro es un espacio vital para que todas las voces sean escuchadas y para que trabajemos juntos en pos de un objetivo común”, afirmó Goñi. Y Martín señaló “la relevancia de este foro como un catalizador para la reflexión y la acción conjunta, resaltando los desafíos y oportunidades compartidos por las comunidades del Mediterráneo”.

Dirk Glaesser, representante de la Organización Mundial del Turismo, señaló con claridad el momento decisivo que enfrentamos: «La pandemia ha demostrado el costo de no ser sostenibles; es momento de actuar para transformar el turismo». Esta llamada a la acción resonó con urgencia, ya que el sector se encuentra en un punto de inflexión que puede marcar su propia supervivencia.

Turismo sostenible

La importancia de la medición en este proceso fue enfatizada por Miguel Galmés, de TUI Hoteles, quien subrayó: “Solo midiendo podemos avanzar hacia un turismo sostenible; es tiempo de medir, actuar y adaptarnos”. Los expertos coincidieron en que la cuantificación de los impactos ambientales, aunque no sea perfecta, y la homologación de las mediciones es un paso fundamental hacia la necesaria reducción, mitigación y compensación de emisiones de CO2.

En línea con esta visión, Sandra Espeja, de la Fundació Marilles, destacó la relevancia de la inversión en la conservación marina como pilar de un turismo sostenible y eficaz contra el cambio climático. También resaltó la interconexión entre la salud ambiental y la prosperidad económica del sector turístico. 

Desde el ámbito financiero, Ramón Juan de CaixaBank apuntó hacia la sostenibilidad como requisito para el futuro del turismo: «Conseguir una experiencia turística sostenible y satisfactoria es clave». También destacó la importancia de integrar prácticas ambientales responsables en los modelos de negocio turístico o de lo contrario, el futuro cercano, no se podrá acceder a financiación.

El geógrafo Marco Mendoza, de TrueWorld, advirtió sobre los riesgos del «greenwashing», argumentando que “ignorar las emisiones indirectas del turismo constituye una irresponsabilidad hacia el futuro”. Su llamamiento a la autenticidad de la información y a la acción integral pusieron de manifiesto la necesidad de estrategias de sostenibilidad genuinas y efectivas frente al “ecopostureo” y el marketing engañoso.

Foro Económico y Social del Mediterráneo

El Foro Económico y Social del Mediterráneo nace, no solo como un espacio de debate, sino también como una hoja de ruta basada la Declaración de Glasgow (COP25, 2021). Las reflexiones compartidas en la primera mesa de debate, subrayaron la importancia crítica de abordar urgentemente el cambio climático de manera científica, conjunta y proactiva. 

El inicio de este proceso de reflexión colectiva marca un hito en el camino hacia un futuro en el que el turismo no solo sea sostenible sino que también contribuya positivamente al bienestar ambiental y social de la región mediterránea. Este compromiso es un paso audaz hacia un turismo que respete, preserve y celebre la rica herencia del Mediterráneo para las generaciones futuras. Para ello el sector turístico debe asumir los impactos reales que provoca en el medio ambiente y, al mismo tiempo, devolver, de forma justa, parte de la riqueza que obtiene al territorio y a la sociedad que le permite hacer negocio en su seno.

La transición energética: un horizonte complejo y compartido

La mesa «Hacia la Descarbonización» subrayó no solo la importancia ética de dejar de contaminar la atmósfera por el turismo, sino también la oportunidad que representa para reinventar el sector en el Mediterráneo

La segunda mesa de debate del Foro Mediterráneo, titulada «Hacia la Descarbonización», se centró en la urgente necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en el sector turístico, responsable del 10% de las emisiones globales. Expertos de variados sectores, incluidos Álvaro Sánchez del Grupo Iberostar, Petra Mut de la Federación Empresarial Balear de Transportes, Xavier Labandeira de la Universidad de Vigo, Joan Simonet conseller d’Agricultura, Ganaderia i Medi Natural del Govern Balear, Eduardo Maynau de Red Eléctrica Española en Balears, y Corinna Graf, CEO de Puerto Portals, compartieron sus perspectivas sobre la importancia de avanzar hacia la neutralidad de carbono, subrayando el papel de las energías renovables y la transformación de las infraestructuras turísticas.

La discusión, liderada por Antoni Riera, catedrático de Economía Aplicada, enfatizó la lentitud en alcanzar los objetivos del Acuerdo de París y la necesidad de una acción climática global acelerada. A pesar de las políticas ambiciosas en Europa, persisten desafíos significativos para cumplir con estos compromisos. Los panelistas coincidieron en que la descarbonización del turismo exige esfuerzos conjuntos que abarquen políticas públicas efectivas, la implementación de estrategias de eficiencia energética y una demanda creciente por servicios turísticos sostenibles.

Joan Simonet resaltó la interconexión entre turismo y agricultura como clave para la sostenibilidad en Baleares, proponiendo una mayor integración de los hoteles con los productos locales. Álvaro Sánchez reveló el ambicioso compromiso de Iberostar por una reducción efectiva de emisiones hacia la neutralidad en carbono. 

Por su parte, Petra Mut presentó una visión crítica sobre la viabilidad de la electrificación del transporte terrestre, dadas las actuales limitaciones de las infraestructuras para la recarga de vehículos eléctricos. Xavier Labandeira instó al sector turístico a tomar en serio el impacto del cambio climático en sus operaciones y estrategias futuras, mientras que Eduardo Maynau destacó el rol de las infraestructuras eléctricas sostenibles, como la conexión por cable marino, en la transición ecológica del turismo.

Corinna Graf enfatizó la necesidad de actuar con urgencia para proteger el delicado equilibrio ecológico que atrae a turistas de todo el mundo. Destacó la importancia del mar y la posidonia no solo como definidores del paisaje insular, sino también como reguladores clave del clima y generadores de oxígeno.

Este debate dejó claro que, más allá de la responsabilidad ética y ambiental, la descarbonización del turismo representa una oportunidad única para redefinir la experiencia turística, asegurando la viabilidad y resiliencia del sector a largo plazo. ¿Están las Islas Baleares, con su excepcional riqueza natural y su compromiso con la sostenibilidad, posicionadas para liderar este cambio? Tal vez, empujados por la urgencia del cambio climático, sea el momento de demostrar que es posible alcanzar un equilibrio sostenible entre el disfrute de los paisajes, la vida de los residentes y la conservación del territorio y la costa. Al menos, ese fue el deseo compartido por todos los participantes. 

Esto solo ha empezado, el foro continúa

El Foro Mediterráneo celebrará la próxima ronda de debates el 3 de abril, enfocándose en Regeneración, Colaboración público-privada y Financiación en el ámbito del turismo y el cambio climático. 

Las conclusiones de las mesas de debate celebradas en Balears se presentarán el 22 de mayo en un evento público en el Club Diario de Mallorca. Y, a finales de junio, habrá un foro final en Valencia donde se presentarán las conclusiones de todos los debates locales.