Llama la atención

Que la enquistada situación del Consell de Formentera haya llevado a convocar la comisión de ética, una decisión que adoptó en el último pleno, protagonizado por los enfrentamientos y reproches y por el ambiente frío y tenso derivado del nulo contacto entre los consellers del equipo de gobierno y el presidente, Llorenç Córdoba. Este, además, dio un paso definitivo en la guerra al votar, por primera vez, contra sus exsocios de Sa Unió.

El lío que se ha generado este curso con los concursos de traslados de la conselleria balear de Educación, por los que docentes que viven en una isla tienen que desplazarse a otra de forma involuntaria. Así como pasan los meses y se acerca el próximo septiembre, el disgusto va en aumento. Este fin de semana ya se han convocado en todas las islas protestas de docentes para exigir una solución y, sobre todo, que no se vuelva a repetir.

Que después de tres años aprobada aún no se haya materializado la propuesta de habilitar accesos hasta Cala Gracioneta.