Los detenidos por colaborar en un intento de fuga de prisión en Ibiza serán juzgados en julio por tráfico de drogas

Tras ser arrestados por la evasión frustrada, la Guardia Civil encontró droga en su domicilio por valor de más de 237.000 euros

Archivo - Furgón de la Policía Nacional en el patio de la Audiencia Provincial de Baleares.

Archivo - Furgón de la Policía Nacional en el patio de la Audiencia Provincial de Baleares. / EUROPA PRESS - Archivo

EP

Los dos detenidos por colaborar en un intento de fuga de la prisión de Ibiza hace unos meses serán juzgados en julio, en la Audiencia Provincial, por un presunto delito de tráfico de drogas. La Sección Segunda de la Audiencia ha acogido hoy una vista por esta pieza, directamente derivada del asalto a un furgón de la Guardia Civil. En el acto se ha fijado la fecha del juicio tras descartar llegar a un acuerdo.

La droga se encontró en un registro domiciliario en octubre, después de que los dos jóvenes británicos, de 24 y 28 años, fueran detenidos por cooperar en el intento de fuga de la cárcel. Los investigadores creen que los acusados llevaban como mínimo un mes dedicándose al suministro de sustancias estupefacientes usando como guarderías el domicilio de uno de ellos, un trastero de alquiler y un contenedor de una empresa de almacenes. En esos puntos se intervinieron distintas cantidades de ketamina, hachís, cocaína y MDMA, por valor de más de 237.000 euros, así como dinero en efectivo (más de 70.000 euros, 8.800 libras esterlinas y 520 dólares americanos). El fiscal pide ocho años de cárcel y una multa de 945.000 euros para cada uno de ellos. Ambos acusados continúan en prisión provisional desde octubre.

Asalto a un furgón de la Guardia Civil

La evasión frustrada tuvo lugar el 9 de octubre, cuando dos encapuchados armados —presuntamente los dos jóvenes británicos— interceptaron un furgón oficial de la Guardia Civil que transportaba a un preso para una cita médica. Los dos encapuchados cortaron el paso del vehículo oficial con un todoterreno, se produjo un forcejeo y aunque momentáneamente el convicto pudo liberarse, finalmente volvió a ser interceptado.

La madrugada siguiente, los bomberos extinguían un incendio en un vehículo de las mismas características que el utilizado en el asalto. El coche estaba estacionado cerca de unas placas fotovoltaicas en el Camí Vell de Sant Mateu.

El interno es un ciudadano británico que se encontraba recluido en Ibiza por diversas órdenes internacionales de busca y captura. Se trataría de una figura de peso en una red de narcotráfico británica, según fuentes cercanas al proceso. Actualmente, está pendiente de la resolución de la Audiencia Nacional sobre su posible extradición.