Un fallo eléctrico, posible causa del incendio en los apartamentos Don Pepe

El incendio obliga a desalojar un bloque y rescatar a tres vecinos de un balcón y la azotea

"En los Don Pepe llueve sobre mojado, es un drama", afirma el alcalde, Vicente Roig

Vídeo del incendio de los apartamentos Don Pepe en Ibiza

Ayuntamiento de Sant Josep

«En los apartamentos Don Pepe llueve sobre mojado. Es un drama», fueron las palabras del alcalde de Sant Josep, Vicente Roig, nada más llegar ayer a esos edificios apartados de es Codolar, en referencia al derrumbe de uno de los bloques en 2020, en un caso que aún está por cerrar. Pero ayer fue un incendio y en el otro bloque, el B, que sigue habitado y cuyos vecinos estaban en el interior, aunque por suerte no hubo que lamentar heridos. Al parecer y según las primeras investigaciones, la causa pudo ser un fallo eléctrico en el bajo en el que se originó el fuego.

La alarma saltó pasadas las 9.30 horas de la mañana y los bomberos estaban allí sobre las 10. Al llegar se encontraron con una lengua de fuego saliendo por un balcón de uno de los bajos de la escalera 7. Un fuego «virulento y con una gran carga térmica», según lo describieron después en sus redes sociales. Además, las llamas salían por las dos fachadas del edificio, por lo que hubo que configurar dos equipos de extinción.

Los bomberos rescatan a varios de los vecinos de la azotea

Los bomberos rescatan a varios de los vecinos de la azotea / DI

En ese momento varios vecinos pedían auxilio desde las plantas superiores del edificio, por lo que tuvieron que evacuarlos con el camión autoescalera. Uno fue rescatado de un balcón y dos más y un perro de la azotea, a donde habían subido huyendo de las llamas y el humo. Sacarlos por el portal era inviable porque en ese momento el humo llenaba la escalera del edificio. Por precaución fueron desalojados todos los vecinos del bloque B, los de la escalera 7, pero también los de las más cercanas En total, tres fueron atendidos por los servicios de emergencias por inhalación de humo y dos más por crisis de ansiedad por la situación vivida.

En los primeros momentos se escucharon varias pequeñas explosiones, probablemente por temas eléctricos o algún pequeño escape de gas.

La rápida intervención de los bomberos hizo que las llamas remitieran pronto. A las 11.10 dieron el incendio por controlado y a las 12.45 por extinguido. El fuego destruyó por completo la vivienda en la que se produjo, uno de los bajos del bloque B y afectó gravemente al primero inmediatamente superior. Otras cuatro viviendas resultaron también afectadas por el humo y el calor.

Preservar la intimidad

Fue el propio alcalde, que acudió enseguida al lugar de los hechos, el primero en informar de lo que estaba sucediendo, ya que el único camino que da acceso a los bloques había sido cortado para facilitar las labores de extinción y preservar la intimidad de los afectados y no se podía acceder. El edil se disculpó por ello ante los medios de comunicación: «Se trata de un drama humano y hay que pensar primero en las personas, que han tenido que abandonar sus casas como estaban. Hay que respetar su intimidad», afirmó.

Poco después todos los residentes en el bloque pudieron regresar a sus viviendas, a excepción de los de la escalera afectada, hasta que los pisos no fueran inspeccionados por los técnicos municipales. En ese momento, los bomberos estaban ya ventilando las casas y refrescando la fachada con las mangueras. Los técnicos les pidieron que apuntalaran el balcón del primer piso más afectado.

Los bomberos rescatan a un vecino de un balcón

Los bomberos rescatan a un vecino de un balcón / DI

También acudieron los servicios sociales del Ayuntamiento de Sant Josep, que ofrecieron a todos los vecinos que lo necesitaran la posibilidad de alojarse en los apartamentos turísticos Bon Sol de Platja d’en Bossa, que finalmente acogerán a los cinco residentes en las dos viviendas más dañadas.

Además de los bomberos, de los que acudieron tres dotaciones con un total de once profesionales, el jefe de servicio, dos caporales y ocho bomberos, con una autobomba, un camión autoescalera y dos nodrizas, en el operativo participaron también cinco efectivos de la Policía Local de Sant Josep y dos patrullas de la Guardia Civil, que se ocuparon de controlar el acceso a la zona.

También trabajaron sanitarios de emergencias del Área de Salud de Ibiza y Formentera y efectivos de Protección Civil, que atendieron a los desalojados y repartieron comida y agua. Además, el suministro eléctrico quedó cortado y los técnicos de Endesa tenían previsto restaurarlo a primera hora de la tarde.