Los villancicos suenan en el hospital de día oncohematológico de Can Misses. Es 20 de diciembre y, como el año pasado, Mari Carmen García y Oti Sánchez, voluntarias de la junta de Ibiza de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), llevan a los enfermos, además de desayuno y sonrisas, la música de la Navidad. Tanit Casanova (piano), Pablo Hidalgo Bello (flauta) y María Navarro(voz), todos ellos luciendo festivos tocados, desgranan las populares melodías en mitad de la sala, en la que 20 pacientes se someten a quimioterapia, atendidos por seis enfermeras y dos técnicos en cuidados auxiliares de enfermería. Todos ellos recompensan su visita con aplausos antes de que los intérpretes se marchen con la música a otra unidad.
Relacionadas
Apenas dan unos pasos, llegan a Hemodiálisis y vuelven a ponerse tras sus atriles y sus instrumentos para cantarles, ahora, a la docena de pacientes que reciben tratamiento de hemodiálisis. Les acompañan, tarareando e incluso meciéndose al compás, los seis sanitarios (cuatro enfermeras y dos técnicos de enfermería) que les cuidan mientras están conectados a las máquinas. La idea de esta iniciativa, que surgió el año pasado de las propias voluntarias, es dar algo de «calidez y alegría» a los pacientes que en estas fechas tan señaladas tienen que seguir pendientes de su enfermedad y de sus tratamientos.