Un premio de arquitectura para la promoción del Ibavi en la calle Xarc

El Consejo superior de los colegios de arquitectos de España (Cscae) ha distinguido con el Premio a la sostenibilidad y salud al edificio de Viviendas de Protección Oficial (VPO) de la calle Xarc, en Vila, obra de los arquitectos mallorquines Pep Ripoll y Juan Miguel Tizón. En estos galardones también había sido seleccionado como finalista otra promoción del Ibavi en Vila, ‘Casas de tierra’, de Marta Peris Eugenio y José Manuel Toral Fernández, ubicada en Platja d’en Bossa.

El veredicto del jurado ha destacado que la obra de Ripoll y Tizón apuesta «por la compleja simplicidad que proporciona la relación entre espacios y las calidades sencillas», con un «enraizamiento en lo popular muy valorable».

Inquilinos de viviendas sociales de Ibiza denuncian desperfectos

Los pisos cuentan con un mínimo de dos orientaciones diferentes, de manera que así se garantiza una correcta iluminación

El edificio, que se encuentra en la zona residencial entre la Avinguda 8 d’Agost y ses Feixes de es Prat de ses Monges, cuenta con 19 viviendas repartidas en cinco plantas. Todos los pisos cuentan con un mínimo de dos orientaciones diferentes, de manera que así se garantiza una correcta iluminación, asoleo y ventilación cruzada natural, según la valoración del jurado.

En estos premios del Cscae se presentaron un total de 429 proyectos, de los q ue fueron seleccionados 177. En la gala también se concedió la Medalla de Oro de la Arquitectura a César Portela en reconocimiento a su trayectoria profesional

Quejas de los vecinos

Se da la circunstancia de que algunos vecinos residentes en las VPO de la calle Xarc expresaron su malestar a principios de este mes por deficiencias que se apreciaban tanto en el edificio como en el interior de algunos pisos, tan solo un año después de que les fueran entregadas las llaves de las viviendas.

El Ibavi aseguró que las deficiencias se revisaban cada mes y que se contrataba a empresas para subsanarlas

Entre sus quejas, denunciaban la falta de mantenimiento de las jardineras, el mal funcionamiento del foco de luz del portal o de las campanas extractoras de las cocinas. Por su parte, el Ibavi aseguró que las deficiencias se revisaban cada mes y que se contrataba a empresas para subsanarlas.

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