En su discurso, la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, destacó que Balears «lidera la recuperación en Europa» gracias al turismo, pero que «es evidente la masificación en determinadas épocas del año», por lo que «se puede reducir el número de plazas».
Así, Armengol dijo que a la vista del resultado de esta temporada, las bolsas de plazas turísticas de cada isla «no hacen falta» y emplazó a los consells, que son los que han de decidir su futuro en los próximos cuatros años, a que las eliminen. En Ibiza hay 9.000 plazas en la bolsa, pero el presidente del Consell, Vicent Marí, puntualiza que esta reserva es consecuencia de «las bajas» registradas en los últimos años y que la decisión de «si se eliminan todas o parte» será «fruto de un debate».
Sobre el escudo social, Marí aseguró que las ayudas directas son «bienvenidas», pero defiende que sería «más ágil y supondría la obtención de resultados inmediatos» si se optase por el modelo del PP de reducir el IRPF. La propuesta de Armengol «no deja de ser una manera de burocratizar la Administración e intervenir más en la vida de los ciudadanos».