Así son las tres islas privadas de Ibiza: una de sus casas se alquila por más de 200.000 euros a la semana

Solo están al alcance de unos pocos mortales, y para poder pasar unos días en algunas de las villas más exclusivas de la isla hay que desembolsar una gran cantidad de dinero.

Ibiza y Formentera son destinos de lujo en el sentido más literal de la palabra. Villas y hoteles con los servicios más sofisticados, restaurantes solo al alcance de unos pocos, yates de dimensiones inimaginables y hasta tres islas privadas para un retiro aún más exclusivo.

Aleix Espargaró enseña en un vídeo su semana de lujo en una villa de Ibiza de 20.000 euros el día: chef privado, masajista...

Tagomago

Situada frente a la costa de Santa Eulària, Tagomago ocupa unas 60 hectáreas y cuenta con una villa de lujo. Entre los servicios a disposición de aquellos que deciden alquilarla destacan el mayordomo, el chef y el capitán de barco para trasladar a los inquilinos allá donde deseen. Además, según detalla Expansión, la casa cuenta con una piscina de agua salada, un jacuzzi, barbacoa y gimnasio.

Actualmente el empresario Matthias Kühn, expareja de la artista Norma Duval, gestiona el inmueble. Han sido muchos los rostros conocidos que se han hospedado en la isla. Desde el futbolista Cristiano Ronaldo hasta miembros de la familia Hannover.

Recientemente, la empresa dedicada al cambio de divisas S Money realizó un informe sobre los Airbnb más caros en los distintos países del planeta donde determina que Ibiza cuenta con el alojamiento con el precio más elevado de la plataforma en España, el segundo en Europa y el cuarto en el mundo.

El Airbnb en cuestión es el que se ofrece en la isla privada de Tagomago situada al nordeste de Ibiza a menos de un kilómetro de la costa. En el momento de realizarse el estudio (los datos son de noviembre de 2022), dormir en este lugar paradisíaco costaba la friolera de 32.000 dólares estadounidenses, es decir, alrededor de 30.000 euros que podrían variar en función de la temporada en la que se quiera alquilar.

Privat Island, como se conoce el alojamiento de Tagomago, cuenta con cinco suites dobles, spa, varias zonas destinadas a la desconexión con vistas panorámicas al mar Mediterráneo, una piscina y un gimnasio.

S'Espalmador

Entre Ibiza y Formentera se encuentra la isla de s'Espalmador. Pertenece al Parque Natural de ses Salines, por lo que es un paraje protegido por su fauna y su flora.

Tiene una superficie de aproximadamente dos kilómetros cuadrados y sus playas son de arena blanca y aguas turquesas.

Las únicas construcciones que hay en s'Espalmador son una villa de arquitectura tradicional y una capilla y otra construcción, además de un faro y una antigua torre de vigilancia. Los actuales propietarios pagaron 18 millones de euros por ella y solo se conoce que se trata de una familia de Luxemburgo.

Sa Ferradura

Frente al Port de Sant Miquel está la isla de sa Ferradura. Tiene 35.000 metros cuadrados y la villa de alquiler más cara de Ibiza, según detalla Expansión. El multimillonario ruso Mikhail Prokhorov es el propietario actua, según el diario económico y en 2018 fue premiada por World's Best Boutique Hote como la mejor finca vacacional de Europa.

La finca tiene todo tipo de lujos y el inquilino que pueda permitírsela tendrá a su disposición una plantilla con 22 empleados.

La villa se anuncia en una página en la que se alquilan islas privadas a lo largo y ancho del mundo, Vladi Private Islands.

La vivienda fue construida en los años 70 pero ha sido renovada en varias ocasiones, la última en 2017.

Así es la mansión de sa Ferradura

La casa tiene una capacidad para 18 personas con una lujosísima suite principal y ocho habitaciones dobles, todas ellas con baño privado. Se alquila por unos 220.000 euros semanales, aunque en julio y agosto el precio puede alcanzar los 300.000 euros.

Como curiosidad, hay sillas que han sido traídas de Japón y una mesa de nogal en uno de los comedores que ha sido hecha a mano por una comunidad Amish de Nueva York.

La casa tiene una espectacular terraza de 750 metros cuadrados con espectaculares vistas y equipada con dos bares, pérgolas, una mesa de mezclas para pinchar música...

Para que los inquilinos tengan una estancia lo más cómoda posible, el precio del alquiler incluye un equipo de personal compuesto por 22 personas con experiencia internacional y que hablan varios idiomas. "Un servicio onmipresente pero discreto", se explica en Vladi.