El servicio de vigilancia, salvamento y socorrismo de Sant Antoni, gestionado por Marsave, salvó ayer la vida a un turista de nacionalidad austriaca de 80 años en la playa de Cala Salada, informa el Ayuntamiento en una nota de prensa.

 Los hechos ocurrieron poco antes de las 10 de la mañana cuando el hombre se estaba bañando en la playa y, minutos más tarde, la hermana se percató que se encontraba boca abajo, por lo que se metió en el mar para socorrerle. Inmediatamente, los dos socorristas, que justo iniciaban el servicio en la playa, acudieron en su ayuda y le sacaron del agua. Seguidamente, realizaron las maniobras de RCP (reanimación cardiopulmonar) y las descargas necesarias con el desfibrilador externo semiautomático (DESA) y consiguieron recuperar al bañista.

 Al lugar también acudió una patrulla de la Policía Local de Sant Antoni y un indicativo del 061 para ayudar en la asistencia. La UVI móvil se encargó de realizar el traslado al hospital de Can Misses. Está ingresado en la UCI y se encuentra estable dentro de la gravedad, informa el Área de Salud de Ibiza y Formentera.

Ambulancia en Cala Salada, ayer ASA