Los pediatras están molestos porque carecen de información por parte de Salud y deben dar la cara ante los padres de sus pacientes sobre cuándo comenzarán a poner la nueva vacuna tetravalente que protege contra 4 meningococos que pueden provocar la peligrosa meningitis bacteriana, una enfermedad que, aunque poco frecuente, cursa con una alarmante mortalidad y graves efectos secundarios.

Y esta falta de información y directrices, síntoma evidente de inacción administrativa, es más preocupante dado que Madrid ha establecido en una orden ministerial que antes de finales del año que viene (2020) deben estar vacunados con el nuevo fármaco tetravalente todos los niños que este y el siguiente año cumplan 12, en torno a 24.000 jóvenes, entre 11.500 y 12.000 por ejercicio.

Sanidad también establece que, con el horizonte de finales de 2021, deben ser rescatadas (vacunadas) todas las cohortes de nacidos entre 2001 y 2008. En números redondos, de aquí a dos años vista deberían estar vacunados con el nuevo fármaco en torno a 90.000 niños y adolescentes de esta comunidad y los pediatras que deben ponerlas aún ni siquiera tienen constancia de que se hayan iniciado los trámites para comprar las vacunas.

Especialistas consultados por este diario han expresado su malestar por la falta de información y Marianna Mambié, presidenta de la Asociación de Pediatras de Atención Primaria de Balears (APapIB), les pone voz. «Hay muchas bacterias que pueden provocar una meningitis pero gracias a las campañas de vacunación (contra el Neumococo y Haemophilus influenzae) se han reducido en gran parte a los meningococos A, B, C, W e Y. La vacuna tetravalente que se ha decidido ahora poner a los adolescentes protege contra los serotipos A, C, W e Y», explica Mambié.

Precisa que el serotipo B sigue siendo el que más casos de meningitis provoca en España: «En la temporada 2017-2018 se contabilizaron 370 casos de meningitis en todo el país. Pues bien, 137 estuvieron provocados por el meningococo B».

Más casos de W e Y

¿Por qué entonces se ha decidido vacunar a la población adolescente con una vacuna que no incluye la bacteria que más meningitis causa? Mambié revela que, como está ocurriendo en países de nuestro entorno como Holanda o Reino Unido, se está dando un incremento de las meningitis causadas por los tipos W e Y. «En toda España se han duplicado. Hemos pasado de 23 a 48 casos por meningococo W y de 17 a 35 por el serotipo Y. Ya se puede decir que las enfermedades provocadas por las bacterias W,Y y C ya igualan a las de la B más prevalente», aporta cifras.

La presidenta de APapIB explica que, siguiendo las recomendaciones que cada año emite el comité asesor de vacunas de la Asociación Española de Pediatría, tanto la institución que preside como la Sociedad de Pediatría de Balears (Sopeba) llevan reclamando desde hace tiempo a Salud que incluya a los menores de un año en la vacunación con este fármaco tetravalente.

Los bebés, más vulnerables

Mambié justifica esta reclamación en que, si bien se ha decidido vacunar solo a los adolescentes porque «son los principales portadores de las bacterias y principal foco de contagio al resto de la población, como una medida de Salud Pública, los más vulnerables ante los serotipos W e Y son los menores de un año».

«Se ha tomado esta decisión pensando que vacunando a los portadores se cortará la trasmisión de la enfermedad», abunda, «pero vacunar a todos los adolescentes es muy complicado porque están en una edad que no van al médico, en la que se mueven mucho geográficamente... Por eso pensamos que los menores quedarán desprotegidos y pedimos que también se les incluya en esta campaña de vacunación como han hecho otras CC AA como Canarias», compara lamentando que Balears siempre esté a la cola de estas iniciativas.

En estos momentos, concluye, el calendario vacunal oficial (financiado con dinero público) protege universalmente contra el meningococo C con tres vacunaciones a los 4 y 12 meses y a los 12 años. Contra el serotipo B, el más prevalente, existe en las farmacias una vacuna desde hace cuatro años que ambas sociedades pediátricas también han reclamado sin éxito que se financie y que, a día de hoy, las familias de Balears deben sufragar de su propio bolsillo.