La quiebra del grupo turístico Thomas Cook ha sorprendido en Balears a unos 44.500 turistas del gigante de viajes. En Ibiza siguen disfrutando aún de sus vacaciones 5.000 visitantes, mientras que en Mallorca son 36.000 y en Menorca 3.5oo. Del total de Mallorca, 22.000 corresponden a la rama alemana y pueden volar con Condor, que sigue operativa, y 6.000 son de TC Scandinavia y también tienen medio de transporte. Solo 8.000 son británicos y se encuentran sin vuelo para regresar a su país.

Todos ellos deben regresar a sus hogares antes del día 6 del próximo mes de octubre. En el caso de los británicos, se les está acomodando en vuelos organizados dentro del plan de repatriación que se ha puesto en marcha.

Así, ayer se cancelaron 14 vuelos de Thomas Cook en Palma, pero al mismo tiempo despegaron de Son Sant Joan cinco aviones de rescate que transportaron a unas 900 personas, de ahí que desde la conselleria se insista en que el retorno de estos visitantes se está produciendo con normalidad.

El anuncio de quiebra del turoperador Thomas Cook está provocando que, sin haber concluido todavía septiembre, algunos hoteles de Mallorca hayan comunicado que cierran por este año al haber perdido la mayor parte de la clientela, pese a que no tenían previsto hacerlo hasta principios de noviembre. Desde los sindicatos se ha anunciado ya que si esta bajada de barrera se hace «por las bravas» los van a tener enfrente, pero al mismo tiempo anuncian su predisposición a negociar y a ser flexibles, pues son conscientes del impacto que la caída de la empresa británica tiene en el sector. Este problema no ha afectado, sin embargo a los hoteles de Ibiza, que están trabajando «con normalidad» [ver página 5].

Fuentes empresariales destacan la precaria situación existente en muchos establecimientos de las zonas más dependientes del mercado británico, sobre todo en Mallorca, pero en las que Thomas Cook también mantenía un buen nivel de actividad. Pero el impacto llega a muchos más lugares, y se centra en aquellos hoteles con más peso del grupo británico.

Estos anuncios de cierre prematuro en Mallorca al dar la temporada de este año por concluida tienen un especial impacto sobre sus plantillas, dado que muchos empleados fijos-discontinuos pensaban que iban a poder mantener su actividad hasta principios de noviembre, y ahora va a ver cómo se reduce en un mes.

El secretario general de UGT-Hostelería, Antonio Copete, reconoce el impacto que para muchos negocios hoteleros tiene la quiebra de Thomas Cook, al perder parte de su clientela para lo que resta de temporada, de ahí que anuncie la predisposición sindical a negociar una conclusión prematura de la misma con el menor perjuicio para los trabajadores y para evitar la destrucción de puestos de trabajo. En este sentido, subraya que el convenio deja margen para ello, y que se abren posibilidades como disfrutar este año de parte de las vacaciones del próximo para poder seguir así cobrando la nómina.

Esta situación explica que desde Balears, al igual que desde otras comunidades autónomas, se estén reclamando al Gobierno central ayudas para los hoteleros afectados.

Transportistas

La quiebra de Thomas Cook también ha afectado a los transportistas de Balears. Un 30% de las empresas de transporte discrecional por carretera del archipiélago se han visto afectadas, según los cálculos de la Federación Empresarial Balear del Transporte (FEBT). Esto equivale a 35 de ellas.

Sin embargo, las empresas seguirán ofreciendo durante esta semana sus servicios porque están «pillados por el contrato» con Thoma Cook, según explicó ayer el vocal de la FEBT, Rafael Roig. Por su parte el vocal de FEBT en Eivissa, Miquel Costa, declaró que las empresas ibicencas afectadas por esta crisis también ofrecerán durante esta jornada el servicio contratado por Thomas Cook, aunque lamentó que desde este lunes «muchos clientes tienen que llegar al aeropuerto y no llegan» a las Pitiüses.

El coste de estos contratos de las operaciones realizadas desde julio hasta septiembre asciende hasta los 5 millones de euros, aún pendientes de pago.