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Balance

Los puertos deportivos registran una ocupación «casi plena» en julio y agosto

Aunque apenas han quedado amarres libres en temporada alta, las marinas de Santa Eulària y Ibiza destacan un descenso en las reservas de última hora

Los puertos deportivos registran una ocupación «casi plena» en julio y agostoToni Escobar

Los puertos deportivos de Ibiza y Formentera repiten, un año más, una temporada alta de ocupación «casi plena». A pesar de que en julio y agosto apenas han quedado amarres vacíos, la mayoría de responsables de las marinas pitiusas coinciden en que este año han disminuido las reservas de última hora y la mayoría advierte de la dura competencia de otros destinos del mar Mediterráneo como la costa azul, el sur de Italia, Turquía y Grecia «más económicos» y «menos masificados». En cuanto a las previsiones de septiembre, la mayoría coincide en que las reservas son similares al mismo mes en 2017, pero la ocupación dependerá de si las condiciones meteorológicas son favorables para atracar en las Pitiüses.

A pesar de que los directores de Marina Santa Eulària, Marina Botafoch, Marina Ibiza, Ibiza Magna, Formentera Mar y Marina Formentera hacen un balance muy positivo de la temporada alta, ya que han estado «casi completos» (no suelen estar al 100% porque algún barco falla a última hora o fondea en el mar) también aprecian algunos síntomas de este verano «raro» de menor afluencia de turistas. «La temporada es buena, no podemos decir otra cosa, pero sí que hemos notado una bajada porque hay menos demanda en reservas de última hora para estos meses», explica Pepe Roselló, el director de Marina Botafoch, que gestiona un total de 428 amarres.

Asimismo, insiste en que para que su negocio vaya viento en popa miman a los clientes más fieles. «Nosotros cerramos los cuadros de reserva entre enero y febrero porque somos un puerto deportivo muy familiar y tenemos visitantes asiduos que repiten temporada tras temporada y se preocupan de tener garantizada su estancia», comenta Roselló, que añade que esta fidelidad les obliga a coger al «cliente de siempre». «Esta es como si fuera su casa», sostiene el director de Marina Botafoch.

Raúl Prats, director de Ibiza Magna, el puerto deportivo calificado «erróneamente» -según él- como el más caro de Europa, afirma que esta temporada ha ido «relativamente bien, aunque no como otras anteriores» y reconoce que, al igual que ha ocurrido en otros sectores como el hostelero, la demanda no ha sido tan elevada como se preveía.

Prats también remarca que han tenido menos solicitudes de last minute para llenar sus 95 amarres (82 en pantalanes y 13 pegados al Martillo) y alerta de que como el alza de los precios en Ibiza la han convertido en un destino «caro», otros como Croacia o Grecia, «más baratos», atraen cada vez a más barcos. En Marina Ibiza también han colgado el cartel de completo en julio y agosto. En su caso, a diferencia de Marina Botafoch, las reservas por anticipado han ido «más tranquilas», por lo que las del día a día han ayudado a igualar los buenos resultados del año pasado, cuando aumentó un 3% su volumen de negocio, según señala a este diario Daniel Marí.

El balance de Lucas Reyes, director de Marina Santa Eulària también es muy positivo, ya que han alcanzado una ocupación del 98%. Al preguntarle si la alta demanda de amarres en Ibiza ha desviado embarcaciones a esta marina, Reyes reconoce que sí. Asimismo, subraya que este año han registrado reservas de mayor duración, de hasta un mes, lo que les permite ofrecer un «mejor servicio» al haber menos tráfico de embarcaciones. E incluso hay clientes que optan por reservar un amarre todo el año y así tener garantizada su disponibilidad para los meses que lo necesitan.

En Formentera Mar y Marina Formentera, en la Savina, la situación es calcada a la de los puertos deportivos de Ibiza: casi llenos en temporada alta, pero unas listas de espera menos abultadas.

Como particularidad, el director de Marina Formentera, Juanjo Costa, destaca que junio ha sido «muy bueno», pese al tiempo inestable, rozando en la segunda quincena el 100%. Mejorar precisamente los resultados en los meses fuera de temporada alta es clave para el sector en la pitiusa menor, según apunta Fernando Gayá, director de Formentera Mar, quienes también han reservado casi la totalidad de sus amarres.»Tendremos que ser más competitivos en los meses de pretemporada y postemporada», sostiene Gayá.

Los seis directores de estas marinas cruzan los dedos para que las condiciones meteorológicas de septiembre sean favorables para atraer a turistas náuticos a las Pitiüses y superar la ocupación de este mismo mes del año pasado.

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