Ni Álvaro, de ocho años, ni su madre, Esther Navarro, habían subido antes en un carro de barana. Ayer lo hicieron para ir a la fiesta que el Ayuntamiento de Santa Eulària organizó por la tarde en sa Font d'en Lluna para reivindicar el valor de su río y recuperar antiguas costumbres de la Nit de Sant Joan. La experiencia, según sus propias palabras, fue «emocionante». Álvaro y cerca de una veintena de jovencitos más se apuntaron al concurso de pintura rápida al aire libre de la Nit de Sant Joan que se llevó a cabo junto al Pont Vell. Mientras unos se acercaban a la orilla del río en busca de inspiración para sus obras otros prefirieron ir a la caza del 'fameliar'. Aitor, de ocho años, tenía muy claras las instrucciones para conseguir hacerse con este duende, que sólo se deja ver en la Nit de Sant Joan y bajo el Pont Vell. Tenía preparada su botella oscura y estaba dispuesto a quedarse hasta medianoche junto al río par coger la hierba que luego se transforma en 'fameliar'.

Además del certamen de dibujo, los juegos tradicionales y los talleres de manualidades, grandes y pequeños pudieron disfrutar del ball pagès de la Colla de Es Broll y de las canciones de Margalida Roig, compuestas por ella misma y dedicadas a Santa Eulària. Josep Juan, más conocido como Pep Xumeu, experto en puentes y fuentes, leyó un manifiesto recordando que «lo que hace único a Santa Eulària es su río».