El juez sustituto del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Ibiza, en este caso el magistrado Santiago Pinsach, titular de Instrucción 4, dictó ayer auto de libertad provisional con cargos para los dos detenidos bajo la acusación de haber retenido y agredido a una mujer durante tres días, confirmado ayer el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB).
Ambos están imputados por delitos relacionados con la violencia sobre la mujer y a ambos se les han impuesto medidas cautelares. Aunque el TSJB no pudo precisar qué tipo de medidas, al parecer se trata de órdenes de alejamiento y, al menos uno de los casos, la retirada del pasaporte.
La semana pasada, el primero de los detenidos, un hombre de nacionalidad irlandesa y 54 años de edad que es pareja de la víctima, fue enviado a prisión provisional sin fianza tras declarar ante la jueza de guardia, que en ese caso era María Luisa Bustillo, titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Ibiza. Una semana después, el juez titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer, Juan Carlos Torres, juez decano de Ibiza, ratificó la prisión provisional dictada en el juzgado de guardia. A este primer detenido, el Juzgado de Violencia Sobre la Mujer le imputó la presunta comisión de los delitos de maltrato psíquico habitual, lesiones, coacciones y amenazas, y, además, se investiga una posible agresión sexual continuada.
Ayer por la mañana fue puesto a disposición del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Ibiza el segundo arrestado, un hombre de 51 años nacido en Mali y con pasaporte francés, que quedó en libertad provisional tras declarar ante el juez Pinsach.
Las detenciones de ambos derivan de las declaraciones efectuadas por la víctima, una mujer de 48 años de edad y nacionalidad irlandesa que, el martes de la semana pasada, entró en la tienda de Vila y se autolesionó con un cúter en el cuello y en las muñecas, y finalmente se clavó un cuchillo en el abdomen.
Marcas y heridas
Marcas y heridas
En el hospital se le detectaron otras marcas y heridas y la mujer dijo a una médico que se las había hecho su pareja, informó la Policía Nacional. Por este motivo, fue arrestado por los agentes de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la comisaría de Ibiza. Al día siguiente la Policía Nacional informó de la detención, y explicó que los motivos de la misma eran que el irlandés había retenido a la mujer durante tres días y que en ese tiempo la estuvo sometiendo a agresiones físicas y psíquicas.
La mujer estuvo varios días en la UCI del Hospital Can Misses, si bien siempre estuvo estable y consciente.
La Policía Nacional dijo que las lesiones que se autoinflingió la mujer en la tienda fueron consecuencia del maltrato sufrido durante los tres días en los que estuvo detenida.
Después la Fiscalía de Ibiza y el Juzgado de Violencia sobre la Mujer interrogaron a la víctima, y a raíz de sus declaraciones se produjo la detención del hombre de Mali.
Días más tarde, la mujer declaró en sede judicial y, al parecer, las manifestaciones que realizó difieren absolutamente de las que hizo a la médico.
La mujer dijo a los investigadores que decidió hacer «un tratamiento» que, presuntamente, llevó a cabo el maliense. También se descubrió que los tres, la mujer y los dos detenidos, habían tomado al menos dos taxis en el tiempo en que dijo que la tenían retenida y que también estuvieron en un bar. Dijo que durante todo el tiempo se sintió impedida para pedir ayuda. También se supo que, en esos tres días, la Policía Nacional acudió al domicilio de la pareja porque los vecinos denunciaron que se escuchaba mucho ruido. Los agentes se fueron del domicilio sin realizar detenciones.
Por otra parte, la portavoz del Govern y consellera de Presidencia, Pilar Costa, anunció ayer que el Ejecutivo balear se personará como acusación particular en las diligencias por este caso de violencia machista, que calificó de «muy grave».
