Temporada

Turistas y empresarios se quejan por unas obras junto a la playa de Es Pujols

Varios establecimientos turísticos de es Pujols denuncian los ruidos y molestias que genera una construcción en el inicio de la temporada

Turistas en la playa de es Pujols, con la grúa al fondo.

Turistas en la playa de es Pujols, con la grúa al fondo. / D.I.

Carmelo Convalia

Carmelo Convalia

Contratar unas vacaciones en Formentera, en un establecimiento en primera línea de mar en es Pujols y encontrarse con una grúa de grandes dimensiones haciendo ruido debe ser lo contrario a las expectativas depositadas en un destino que ofrece tranquilidad, aguas cristalinas y sol. Eso es lo que tienen que soportar decenas de turistas que se alojan en el entorno de la calle des Fonoll Marí, en es Pujols.

Responsables de varios establecimientos colindantes a las obras han denunciado los hechos ante la conselleria insular de Urbanismo, al entender que existe una ordenanza que limita la ejecución de las obras en núcleos urbanos entre el 1 de mayo y finales de octubre, precisamente para no molestar al turista.

Pero ayer la situación estalló con quejas de los clientes de estos establecimientos; incluso en un momento dado, la playa colindante se vació de bañistas por el insoportable ruido y las molestias que provocaba la maquinaria pesada.

Una de las responsables de los establecimientos afectados se dirigió ayer al Consell para pedir explicaciones: «Me han dicho que hoy [por ayer] sería el último día de obras y ruidos, vamos a esperar a hoy a ver qué pasa, pero es absurdo que hayan permitido continuar las obras».

Según ha podido saber Diario de Ibiza, el Consell de Formentera emitió una circular a las obras en marcha a finales de abril, recordando que la ordenanza municipal prohíbe los trabajos que generan molestias en entornos urbanos. Sin embargo, algunos promotores pidieron una prórroga de 15 días que les fue otorgada. Incluso se informó de que a partir de hoy la Policía Local vigilaría para evitar que se repitieran estas molestias que dañan la imagen de la isla, especialmente en una localidad en la que todo gira en torno a la actividad turística. Esta promoción ya fue motivo de polémica en su momento, pero a mediados de noviembre de 2023 fue adquirida por All Iron Inversiones 2017, una compañía vinculada al actual presidente del Athletic de Bilbao, Jon Uriarte Uranga.

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